La madre de Cameron firma una petición contra los recortes de gastos

La madre de Cameron firma una petición contra los recortes de gastos

Londres.  Mary Cameron, madre del primer ministro británico, David Cameron, ha firmado una petición contra unos recortes del gasto en la circunscripción de su hijo, a fin de evitar el cierre de unos centros para niños, informan hoy medios locales.

La madre del “premier”, magistrada retirada de 81 años, colocó su nombre en la petición que quiere impedir que 44 centros en Witney, la circunscripción electoral de Cameron en el sur de Inglaterra, sean cerrados por el ayuntamiento del condado de Oxfordshire.

Los trabajadores municipales tienen previsto secundar la próxima semana una huelga de 24 horas en protesta por estos planes, que hará efectivo el ayuntamiento administrado por el Partido Conservador, al que pertenece el jefe del Gobierno.

Estos centros ofrecen asesoramiento gratuito a las familias sobre el cuidado de los pequeños y también educación preescolar.   Al parecer, Mary Cameron firmó la petición mientras hacía una visita a su hijo en Oxfordshire, según el tabloide “Daily Mirror».

“Mi nombre está en la petición pero no quiero hablar más del asunto”, dijo Mary Cameron a ese periódico.   Estos centros serán sustituidos por otros ocho pero a los que sólo podrán acceder las familias que estén en una situación vulnerable, previa recomendación del médico de cabecera.

Jill Huish, de la campaña Salvar los Centros para Niños de Oxfordshire, dijo hoy que está “encantada de que Mary Cameron se haya unido en contra del cierre de los centros para niños por parte del ayuntamiento conservador».

“Parece ser una situación extraña -agregó- que David Cameron no pueda defender los centros para niños de los crueles recortes que él ha permitido que su propio Gobierno imponga a las autoridades locales».

La petición ya ha sido firmada por más de 7.000 personas y está dirigida al ayuntamiento y a su responsable de educación, Melinda Tilley.

El Gobierno de Cameron ha establecido duros recortes del gasto público, especialmente en las áreas de ayudas sociales, en busca de reducir el elevado déficit británico.

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