Kelvin Herrera no pudo contener la carcajada cuando se le preguntó sobre los vaticinios, basados en análisis estadísticos, de que esta será una mala campaña para los Reales de Kansas City.

“Tienen unos números locos esas computadoras”, dijo el dominicano, uno de los integrantes del formidable grupo de relevistas del equipo que en 2016 aspira a convertirse en el primero que repite como campeón de las Grandes Ligas en 16 años. ¿Qué dicen los pronósticos? Según FanGraphs, los Reales obtendrán 77 victorias.

Para PECOTA, el modelo que el gurú de los estadísticas Nate Silver elaboró para Baseball Prospectus, el resultado es más pesimista: 75 triunfos y quedarán últimos en la división Central de la Liga Americana. “Los Reales pasan de eso. Estamos en nuestra línea y no en la de las computadoras”, indicó Herrera. Desafiar lo que dicen las fórmulas estadísticas se ha convertido en una especialidad en Kansas City.

Tras llevarse el primer lugar de la división con 95 victorias, los tenaces Reales alzaron su primera corona desde 1985 al vencer en cinco juegos a los Mets de Nueva York en la Serie Mundial.

Se suponía que solo iban a ganar 72 partidos, de acuerdo con los datos. Herrera no demoró en colocar un mensaje en su Twitter: “¿Se acuerdan cuando la gente nos decía que éramos cosa de casualidad? Eso fue adorable”, escribió en la red social, añadiendo tres emojis.

“Que sigan dudando de nosotros, así nos motivamos más”, destacó Salvador Pérez, el receptor venezolano que fue consagrado como el Jugador Más Valioso de la Serie Mundial.

EL SECRETO. Los Reales tienen como dogma tener bateadores de contacto y corredores que se empeñan en alcanzar una base extra. Pueden ser considerados como el mejor equipo defensivo de las mayores. Su rotación abridora no intimida, pero saben compensarlo con un bullpen intratable.

En un parpadeo pueden sustraer del bolsillo la victoria que el rival creía tener asegurada. Pregúntenle a los Mets y su as Matt Harvey, que en el quinto juego del Clásico de Otoño dejaron escapar una ventaja 2-0 en el noveno inning. Kansas City empató la pizarra, con la anotación de Eric Hosmer tras una audaz carrera y un pésimo tiro del primera base Lucas Duda.

Los Reales ganaron, pese a estar al frente en apenas 13 de los 53 innings que se disputaron. “Hay que salir a jugar y ejecutar cada uno de los aspectos del juego de béisbol”, comentó el gerente de los Reales Dayton Moore.

También se han visto bendecidos por una importante cuota de buena suerte en los últimos dos años. Abajo 2-1 en la serie de primera ronda contra Houston y perdiendo por tres carreras en el octavo inning, voltearon el marcador para imponerse. Algo similar ocurrió en el duelo de comodines contra Oakland en 2014, cuando remontaron dos veces, incluyendo un déficit de cuatro carreras.

Pero no olvidan el séptimo juego de la posterior Serie Mundial en la que tuvieron a punto de derrotar a San Francisco, pero la carrera del empate en los pies de Alex Gordon se estancó en la tercera base. “Estuvimos a 90 pies de estar hablando ahora de la posibilidad de un tricampeonato”, dijo el manager Ned Yost, cuyos Reales pondrán en marcha la defensa del título recibiendo el domingo a los Mets en el Kauffman Stadium.

DINASTÍA.Ningún club ha podido revalidar el título desde la tripleta de los Yanquis de Nueva York en 1998-2000. “Estos jugadores son conscientes que tienen al alcance la posibilidad de hacer historia y no quieren desperdiciar la oportunidad de hacerlo”, afirmó Yost.

Lo que conspira a favor de los Reales es que mantienen intacto al núcleo de piezas que surgieron de sus propias filas vía el draft, canjes y la cantera de Latinoamérica, como es el caso de Pérez, Herrera, Hosmer, Gordon, Alcides Escobar, Lorenzo Cain, Mike Moustakas y Yordano Ventura.

Dejaron partir al pitcher abridor Johnny Cueto, al segunda base Ben Zobrist, al jardinero derecho Alex Ríos y al relevista Ryan Madson. Para la rotación, confían que el dominicano Ventura pueda consolidarse como un as e Ian Kennedy toma el puesto dejado vacante por Cueto en una rotación que completan Edinson Vólquez, Chris Young y Kris Medlen.

El mexicano Joakim Soria reemplaza a Madson como preparador de mesa del cerrador Wade Davis dentro de un bullpen que también incluye a Herrera y Luke Hochevar.

Por tercer año seguido, disponen de tres ganadores del Guante de Oro, con Pérez, el primera base Hosmer y el torpedero Escobar. Pero tienen interrogantes en la segunda base y el bosque derecho. No se debe descartar que Raúl Mondesí hijo eventualmente le quite el puesto a Omar Infante en la intermedia, mientras confían que Paulo Orlando, Jarrod Dyson y Reymond Fuentes sabrán encargarse del derecho.

¿FIN DE CICLO A LA VISTA?. Beneficiados por la euforia de dos postemporadas consecutivas, los ingresos de los Reales han crecido. Vienen de una campaña en la que convocaron a 2.708.549 espectadores, dejando atrás el récord previo de 2.477.700, fijado en 1989.

Fue lo que les permitió subir su gasto en unos 20 millones de dólares para alcanzar la cifra sin precedentes de 135 millones. Pudieron modificar los términos del contrato con Pérez, que pasó de 7,5 millones por cinco años, a una extensión de 52 millones por cinco campañas.

Tampoco dejaron ir al jardinero izquierdo Gordon en la agencia libre al retenerle con un pacto de 95 millones por cinco años. Pero Hosmer, Davis, el jardinero Cain y el antesalista Moustakas podrán declararse agentes libres tras la campaña de 2017, y se antoja sumamente difícil que puedan conservar a todos. Con este grupo actual, el margen para ganar es estrecho.

CONCLUSIÓN: Darle más descanso a Pérez con el fin que su producción ofensiva no merme en el tramo final es fundamental. Trataron de hacerlo el año pasado, cuando acabó con 139 juegos tras los 146 de la campaña anterior. Cuatro de los últimos campeones de la Serie Mundial no pudieron alcanzar los playoffs, con los Cardenales como la excepción en 2012. No es fácil sostenerse en la cima. ¿Lo harán los Reales?