Llevo años albergando el deseo de que la Escuela de Comunicación de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) siga avanzando en el necesario camino hacia la modernización del proceso de enseñanza y de la comunicación en sí.
Y no es por chauvinismo, dado el honor que tengo de ser su egresada, sino por las características socioeconómicas de su estudiantado, compuesto, muchas veces, por los hijos de Machepa y del Pollero, quienes, por ende, tienen en la educación universitaria tal vez la única posibilidad de mejorar sus conocimientos y participación en un sistema que suele excluirlos.
Pero, para lograr esto, es vital que el pensum vaya acorde con las nuevas prácticas y tecnologías de la comunicación que estamos implementando en las redacciones, cabinas y estudios de los medios de comunicación. De lo contrario, tendríamos estudiantes que egresan de las aulas sin la capacidad de responder a lo que la sociedad y los medios demandan hoy día.
En ese sentido, a través de personas como la doctora Helen Hasbún he sabido del esfuerzo encomiable que, en la actual gestión que encabeza el maestro Rodolfo Coiscou, hizo un equipo para avanzar en la reestructuración y modernización del programa de estudio. Y ahora que hay elecciones internas en esa escuela, me parece vital que ese siga siendo el norte.

Al respecto, he seguido con atención el intercambio de ideas y propuestas de sus candidatos, a propósito de un debate, organizado por estudiantes de comunicación, que se realizó el lunes pasado.
En el caso del maestro Juan Tomás Olivero, profesor titular, su propuesta académica tiene como eje central una visión estratégica de la Escuela de Comunicación Social insertada en el mundo de las Tecnologías Informáticas, el Pensamiento Social Contemporáneo y la Construcción de un Nuevo Modelo Comunicacional. En un esquema, que él dice es su centro, promete además de revisar el modelo académico y adecuar las metodologías de la enseñanza.
Mientras la maestra Gladys Valdez, coordinadora de la cátedra de Teorías e Investigación, se compromete a trabajar para lograr el perfeccionamiento profesional y la actualización de los docentes en el área académica y tecnológica. Para esto, promete colocarse de cara a la sociedad de la información o del conocimiento, y visualizar el nuevo contexto de la información multimedia y en red.
Lamentablemente, el maestro Félix Almonte , el otro candidato, no participó en el debate, por lo que no tengo conocimiento de su propuesta, pero ojalá se encaminara en este sentido, porque entiendo eso amerita la UASD.
Y es que, reitero, la Escuela de Comunicación debe seguir avanzando en el camino hacia la actualización y modernización, digna de ser referente, partiendo de que se trata de una academia bautizada como la Primada de América.