PANAMÁ.ap. La carrera de Jenrry Mejía quedó en un abismo luego que las Grandes Ligas lo suspendiera de por vida hace tres años después de dar positivo en tres pruebas de sustancias prohibidas.
El lanzador dominicano, de 29 años de edad, aseguró que fue el momento más terrible en su vida.
«Era enfrentarme a la MLB (las iniciales en inglés de la organización de Grandes Ligas del béisbol estadounidense), enfrentarme al mundo, yo solo, para poder regresar», afirmó.
Pero Mejía ha vuelto a vivir un renacimiento en su carrera, después que el comisionado Rob Manfred le otorgó la readmisión condicional el 6 de julio y señaló que Mejía podría regresar a las Grandes Ligas en 2019.
El ex cerrador de los Mets de Nueva York, que integra el equipo de República Dominicana -las Estrellas Orientales- en la Serie del Caribe que se disputa en Panamá, logró un contrato con los Medias Rojas de Boston para pujar por un espacio como relevista.
Mejía está positivo de que podrá lanzar otra vez en las mayores.
Y a juzgar por lo que demostró en el arranque del torneo, el regreso no debería sorprender. El relevista tiró el lunes dos sólidos innings, en los que no permitió carreras y ponchó a tres, en la victoria 3-1 sobre Puerto Rico, en la primera jornada de la serie en Panamá.
En partes de cuatro temporadas con los Mets, Mejía registró marca de 9-14 con efectividad de 3.68 y 28 salvamentos en 113 presentaciones y 183.1 entradas. Su mejor campaña fue en el 2014, cuando salvó esos 28 juegos y tuvo promedio de carreras limpias de 3.65 y 98 ponches en 93.2 innings lanzados.
«Es un paso a la vez», dijo con mucho entusiasmo el viernes a periodistas, previo a un partido contra Panamá. «Yo lo que quería era conseguir volver al béisbol nuevamente y ahora a seguir trabajando fuerte. Si Dios lo permite, voy a estar nuevamente en Grandes Ligas».
Mejía habló de su caso y reconoció sus errores.
Aseguró que se sintió muy solo tras el castigo que lo suspendía de por vida en 2016, pero que salió del pozo con el respaldo de su familia y el aliento, aunque esporádico, de algunas figuras dominicanas, como el integrante del Salón de la Fama Pedro Martínez, con el que hizo contacto cuando estuvo con los Tigres de Licey, y el veterano Bartolo Colón, entre otros.
«Me encontré con Pedro y ‘me dijo que siga trabajando fuerte, que no pierdas la fe'», señaló. «Ese señor es un hombre de fe».
«Ahora Boston me necesita como relevista».