Cuatro de las diez obras que más se sobrevaluaron para favorecer a la empresa Odebrecht fueron construidas en la República Dominicana, según el informe “Investiga Lava Jato”, un detallado reportaje realizado por veinte periodistas para el consorcio internacional de investigación periodística Convoca.
En la publicación se establece que dos de las seis obras restantes se construyeron en Panamá, otras dos en Perú, una en México y la última en Mozambique.
La Autopista Don Alberto Motta, de Panamá, fue la obra a la que más le aumentaron el presupuesto: costó US$627,295,592 adicionales, lo que implicó un 290% de incremento al presupuesto original.
La segunda obra que más se incrementó fue el Acueducto Hermanas Mirabal, con US$117,187,500 adicionales, para un 229%; y la tercera la Hidroeléctrica de Pinalito, en US$230,222,243, para un 175.7% de incremento presupuestal.
Las otras dos obras dominicanas que aparecen en ese listado son la Hidroeléctrica Palomino, que aparece en el sexto lugar, con un incremento presupuestal de US$367,862,580, para un 163%; y la Circunvalación de La Romana, que costó US$100,650,569 más, para un aumento de un 132%.
La mayoría de los incrementos presupuestales fueron hechos por extensiones de plazos, obras adicionales y alteraciones de ingeniería que no pasaron por concursos públicos y se mantuvieron en manos de la constructora brasileña y sus socias, mediante reiteradas modificaciones a los contratos o normas especiales que se saltaron las leyes de contrataciones.
El que más firmó. El expresidente Leonel Fernández fue el mandatario que más contratos firmó, de los diecinueve presidentes de América Latina y África que concedieron contratos a la empresa Odebrecht.
Con 12 proyectos otorgados, Fernández está a la cabeza de una lista en la que le siguen los expresidentes Ricardo Martinelli, de Panamá; y el fallecido Hugo Chávez, de Venezuela, con 11 proyectos cada uno; Alejandro Toledo, de Perú, con ocho contratos; y Rafael Correa, de Ecuador; y Ollanta Humala, de Perú, con seis cada uno.
Con cuatro proyectos están Martín Torrijos y Juan Carlos Varela, expresidente y presidente de Panamá, respectivamente; Enrique Peña Nieto, presidente de México; y Alan García, expresidente de Perú.
Con tres proyectos están Danilo Medina, presidente dominicano; y Cristina Fernández de Kirchner, expresidenta de Argentina; y con dos Hipólito Mejía, expresidente criollo.
Con un proyecto cada uno están los expresidentes Vicente Fox, de México; Otto Pérez Molina, de Guatemala; Néstor Kirchner, de Argentina; Armando Guebuza, de Mozambique; y Alvaro Uribe, de Colombia. Además está el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, con un contrato.
Sobrevaluación. Los incrementos presupuestales de diez de las obras que realizó Odebrecht en la República Dominicana representaron un monto de US$1,229 millones, lo que coloca al país en el tercer lugar en la lista de los países donde más se engrosaron los presupuestos. En la delantera están Perú, con US$1,932 millones de sobrecosto en 16 proyectos; y Panamá, con US$1,778 millones de sobrecosto en 12 proyectos.
En los siete países en los que Odebrecht confesó que pagó sobornos a los funcionarios e intermediarios se construyeron más de 50 obras que tuvieron costos adicionales por más de US$6,365 millones en relación a los valores iniciales de los contratos que se suscribieron entre los años 2001 y 2016.
De las obras con saltos presupuestales en Perú, Panamá, República Dominicana, Ecuador, México, Colombia y Mozambique hay 31 que son investigadas por el Ministerio Público o la Contraloría de esos países.
Esto representa el 61% del número total. Por otra parte, siete de las obras (el 23%) está en las planillas de la División de Operaciones Estructuradas de Odebrecht, más conocida como la “Oficina de Sobornos”.
Esa oficina fue mudada a República Dominicana en el 2014, según la información que entregó al Ministerio Público Federal de Brasil (MPF) Hilberto Mascarenhas Alves da Silva Filho, exdirectivo de ese departamento.
Odebrecht. “Investiga Lava Jato” habló con las filiales de Odebrecht en cada país y en la sede central de la compañía. Las cifras de las obras fueron contrastadas con la empresa, que explicó además que los sobornos confesados por la empresa no fueron destinados al incremento del presupuesto de los proyectos que construyeron, sino para garantizar la adjudicación en las licitaciones y el cumplimiento regular de las condiciones contractuales.