Hay que esperar los resultados, desde luego, pero no hay dudas de que la iniciativa del alcalde de Santiago, Abel Martínez, de firmar un acuerdo de buena voluntad con los sindicatos y federaciones del transporte en el que ambas partes se comprometen a trabajar para mejorar el tránsito y el transporte de pasajeros en la Ciudad Corazón puede resultar una alianza productiva digna de imitar por otros ayuntamientos, pues sin el concurso de choferes y transportistas no habrá manera de poner orden en el caos que gobierna en las calles de nuestras grandes ciudades. El núcleo del acuerdo, rubricado entre el alcalde Martínez y el presidente de la Central Nacional de Trabajadores del Transporte (CNTT), Juan Marte, es un Código de Conducta de quince puntos. ¿Qué dice ese Codigo de Conducta? Que los vehículos de transporte en las diferentes rutas del municipio deben llevar sus identificaciones en un lugar bien visible, darle paso y otorgar preferencia a los peatones, respetar los semáforos sin importar la hora ni el dia de la semana, no recoger pasajeros en esquinas e intersecciones, entre otras acciones que se espera repercutan de manera positiva en la mejoría del tránsito, el orden de la ciudad y la conciencia de los munícipes. Claro está, como dije al principio y vuelvo a repetir ahora, habrá que esperar los resultados de esa alianza para aplaudir y celebrar, porque lo cierto es que tendrán que trabajar mucho, ambas partes, para que esos quince puntos del Código de Buena Conducta no se relajen y terminen cumpliéndose un día si y el otro no y viceversa. Pero en el mientras tanto puede decirse que es un “experimento” que vale la pena intentar replicar, por lo que estaremos siguiéndolo bien de cerca, y por supuesto deseando que funcione por el bien de todos los santiagueros.