Los atletas de clavado y polo acuático de la República Dominicana han paralizado sus entrenamientos, debido a que la piscina olímpica del Parque Acuático del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte tiene más de un año en un total abandono.
La misma acumula “aguas verdes”, la que produce mosquitos y viene afectados a los miles de niños que entrenan en dicha instalación deportiva. Juan Carlos Pereyra, uno de los padres preocupados, dice no entender como una instalación tan importante para el desarrollo de la natación en el país y que está colocada a pocos metros de la oficina del ministro de Deportes, está prácticamente abandonada.
“Tengo más de un año mirando las condiciones en que se encuentra la piscina de clavados y no he visto al personal de un patronado y mucho menos de las autoridades del Gobierno ponerle atención a esa instalación”, dijo Pereyra.
La piscina de clavado no funciona, motivo por el cual los atletas de esa disciplina, incluyendo los de la selección nacional, no han podido ejercer su rutina de entrenamiento.
De hecho, no solo los atletas de clavado están a la intemperie, sino también más de 40 atletas que practican polo acuático están imposibilitados de ejercer sus funciones.
En el presente año la selección de clavado tiene varios compromisos internacionales, tales como los Juegos Centroamericanos y del Caribe del 2018, que se van a celebrar en Colombia.
“Nosotros no sabemos qué pasa con la fosa de clavados. Vemos que está sin agua, sin mantenimiento, en estado deplorable, pero hemos tratado de comunicarnos con el patronato y nadie nos dice nada. De hecho, hemos enviado varias cartas no han tenido respuesta alguna”, agregó Pereyra.
La instalación fue construida para los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1974 y reconstruida en el 2013, para la celebración en el país de los Juegos Panamericanos de Santo Domingo. Dicha instalación es administrada por un patronato, que según los padres y entrenadores no ofrece ninguna explicación de las condiciones en que se encuentra la piscina. En la actualidad, los atletas de dicha disciplina han tenido que abandonar la misma, por no tener una instalación y una explicación de los que dirigen el deporte en la República Dominicana.
La figura principal del clavado dominicano, Frandiel Gómez, hoy se entrena en Colombia, porque en el país no existen las condiciones para sus entrenamientos.