A PLENO PULMÓN
Volver a las andadas

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La política es siempre igual; cambia muy poco en el curso de los siglos. Desde los tiempos bíblicos podemos documentar parecidos comportamientos en los líderes. David, rey de Israel, a la hora de morir dio instrucciones precisas para vengar la muerte de su hijo, Absalón, quien intentó desalojarle del trono. Joab, jefe del ejército de David, decidió matar al traidor Absalón sin consultar con  su padre. Joab, fiel defensor de David, era hijo de Sarvia, una hermana del rey. Por tanto, Salomón, heredero de David, debería eliminar a Joab, hijo de su tía, como primera medida de su gobierno. La política no respeta parentesco, vínculos de sangre, ni sentimientos de adhesión.

 En Israel existe un monumento funerario al que llaman Tumba de Absalón, aunque no contiene los restos del hijo que quiso derrocar al padre. Los estudiantes que regresan a sus casas, al pasar por el cementerio en el cauce seco del río Kidrón, escupen una piedra y la lanzan contra la tumba del “hijo malo de David”. La crueldad, la traición, el abuso, acompañan la política en todos los tiempos. Las técnicas de dominación cambian, las instituciones del derecho público “se perfeccionan”; pero el fondo inclemente y sórdido  de la acción política permanece intacto, como el esqueleto fósil de un dinosaurio.

 Lo que ocurre ahora en Siria con el gobierno de El-Assad, es lo que ha ocurrido siempre en Alepo, en Damasco, en toda esa región acostumbrada a los más dolorosos sucesos políticos. Y no se trata solamente del Oriente Medio, antiguo o contemporáneo; en las Antillas pasa lo mismo. En Santo Domingo hemos tenido varias dictaduras; la de Trujillo puede servir de ejemplo por ser la más reciente. ¿Cómo actuaban los familiares del “Benefactor de la Patria”? Nepotismo es la palabra que más se utiliza para designar la preferencia que dan los gobernantes a sus parientes en la concesión de empleos públicos.

Nepotismo procede de la palabra latina “nepote”, que significa sobrino. En Cuba, Raúl Castro sucedió a Fidel Castro en la conducción del Estado; en lugar de un sobrino es un hermano. Las constituciones tratan de regular la sucesión presidencial. Pero es sumamente difícil pronosticar qué ocurrirá en Cuba o en Venezuela.

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