A tres meses de su remozamiento las puertas del imponente y majestuoso Faro a Colón fueron abiertas al público, luego de que fueran cerradas para iniciar los trabajos de remodelación por un monto de RD$30 millones.
La primera fase del remozamiento del museo incluyó el lavado completo de la estructura tanto dentro como fuera, además del cambio completo de los pisos, luces, puertas, corrección de problemas de filtración, fumigación general, asfalto de calles, aceras y contenes y la eliminación de arbustos y maleza.
Durante el proceso se reforzó también el personal de seguridad y de limpieza, para la vigilancia diurna y nocturna el museo cuenta con 12 militares que comparten la labor con el personal del Cuerpo Especializado de Seguridad Turística (Cestur).
El gobernador del monumento, Diógenes González, manifestó que en enero será aumentado el personal de seguridad y de limpieza, para poder cumplir con las demandas de las personas que acuden al lugar.
“Por ese lado los visitantes pueden estar tranquilos porque en el museo su seguridad está garantizada en su totalidad”, manifestó a este diario el gobernador.
Asimismo explicó que la obra se encuentra remozada en un 95%, ya que todavía está pendiente la remodelación y apertura del segundo y tercer nivel.
“Esta parte no ha sido concluida porque los trabajos de esos dos niveles son más complejos”, expresó González.
Un paseo por el museo. Al visitar el museo las personas podrán disfrutar de la sala de las 21 vírgenes, donde se encuentran las imágenes de las madres protectoras de igual número de países.
Además de una réplica de la Capilla Santa María de la Rábida, donde Cristóbal Colón realizó la comunión para salir a su primer viaje. Todos los domingos a las 11:30 de la mañana el museo ofrece una misa para los visitantes.
En el centro de la gigantesca obra se encuentra el mausoleo con los restos de Cristóbal Colón, el cual se abre cada 12 de octubre, en conmemoración del Día de la Raza.
Tiene además una sala dedicada al descubrimiento, donde se encuentran replicas de las tres embarcaciones que llegaron a la isla, así como el ancla original que uso Colón cuando arribó a la isla abordo de la Santa María.
En la sala se hay también decenas de cuadros con el rostro del almirante, un calendario Maya original y algunas replicas de los tratados y capitulaciones de Santa Fe.
Como parte del intercambio cultural el monumento cuenta con 48 exhibiciones de diferentes países. Cada embajada se encarga de entregar las piezas que desean mostrar. Algunos de los estand son remodelados.