El Departamento de Comercio de Estados Unidos adoptó ayer las resoluciones definitivas que ponen fin a sus investigaciones antidumping y antisubvenciones contra la aceituna negra de España, aumentando en un 60% los aranceles contra la aceituna negra de España.
Las medidas han causado pánico en la industria alimentaria española, que teme acciones similares se apliquen a otros productos.
“Estas resoluciones no solo mantienen los aranceles provisionales impuestos en noviembre y enero pasados, sino que los aumentan notablemente, un 60%. Como consecuencia de la investigación antisubvención se impone un arancel medio del 14,75% frente al 4,47% provisional establecido en noviembre.
Como resultado de la investigación antidumping, impuso un arancel medio del 20%, frente al provisional del 17,13% establecido en el mes de enero.
Mientras que el arancel antidumping se aplicará inmediatamente en cuanto se publique oficialmente, el arancel antisubvención no se aplicará hasta que la ITC (Comisión de Comercio Internacional) -un segundo organismo administrativo- adopte a finales de julio su resolución definitiva en la que determinará si las exportaciones de aceituna negra de España causan daño o son una amenaza para la industria de EEUU. Si este organismo estableciera que no existe tal daño o amenaza, ambos aranceles (antidumping y antisubvención) quedarían sin efecto.
«Hay un gran temor porque lo que está cuestionándose es la PAC (Política de Agraria Común) y tras el arancel a la aceituna es posible que se haga lo mismo con el resto», aseguró Mauricio García Quevedo, el director general de la patronal FIAB (Federación de Industrias de Alimentación y Bebidas).