Para el procurador general, Jean Alain Rodríguez, la violencia contra las mujeres es ya “bastante alarmante”, y por eso anhela penas severas contra los agresores, a fin de combatir el flagelo.
Así lo planteó ayer, al pedir que “las condenas sean significativamente fuertes” contra los hombres violentos, sean reincidentes o no.
Por eso implora el apoyo de todo el sistema judicial, a fin de que “este flagelo ya se detenga o se reduzca a su mínima expresión”.
Aunque desea castigos drásticos contra los hombres violentos, el funcionario está consciente de que la parte más importante es la prevención.
Por tanto anunció un plan de trabajo que incluye ampliar de 18 a 28 las unidades de atención a víctimas, mejoría del sistema de calidad para depurar los casos, fortalecimiento de los expedientes y acciones con la sociedad civil.
Rodríguez ofreció sus declaraciones tras participar en el “Foro Propuesta Multisectorial en Género y Migración: Eliminación de toda violencia contra la mujer”, auspiciado por el Ministerio de Interior y Policía y el Instituto Nacional de Migración.
Instó a denunciar los casos de violencia intrafamiliar y garantizó que las denuncias serán atendidas por la Procuraduría General.
El magistrado dijo que la persecución debe ser justa y pidió que los responsables sean encarcelados cuantas veces sea necesario.
Afirmó que la Procuraduría General continuará solicitando penas duras en los casos de violencia machista contra las féminas.
En tanto, Florinda Rojas, directora del Instituto Nacional de Migración, consideró que la violencia no solo se da en la casa, sino también cuando las mujeres quedan desamparadas por carecer de orientación y protección social.
Entiende que, para afrontar el flagelo, se requiere trabajar desde el hogar y la escuela.