El exvicepresidente de la República, Rafael Alburquerque, calificó como ‘totalmente improcedente’ la actitud de la embajada de Estados Unidos al quitar el visado al presidente de la Junta Central Electoral (JCE), Roberto Rosario. Expresó que las cancelaciones de visas regularmente son por actos delictivos, y todo el mundo conoce de la conducta seria y responsable de Rosario.

Reconoció el derecho del país norteamericano para determinar a quien le otorga o no un visado, empero entiende, que no es el trato que merece Rosario.

“Yo creo que las cancelaciones de visa, generalmente son por alguna actitud delincuencial, o algo. Todo el mundo conoce la actitud honorable, seria y responsable que ha tenido siempre el doctor Roberto Rosario, de manera que para todos es muy extraña esta cancelación, expresó Alburquerque.

Recordó que Rosario siempre ha mantenido en alto la labor del país y de la Junta, por lo que consideró que la acción de la embajada no tiene ningún tipo de explicación. “Sabemos que los Estados Unidos, como país soberano determina a quién le da y a quién no le da la visa, pero no es el trato que se merece una personalidad como Roberto Rosario”, recalcó.

Alburquerque fue entrevistado en los pasillos del Palacio Nacional a donde, según dijo, acudió para poner al presidente Danilo Medina, al tanto de los avances de las conversaciones sobre la Ley de Partidos y Ley Electoral, que se sostienen al interior del Partido de la Liberación Dominicana.

Dijo que acudió a rendir el informe al presidente Medina, debido a que éste no pudo acudir a la reunión del Comité Político realizada el pasado lunes.

Se recuerda que el pasado jueves la JCE difundió la información de que Estados Unidos había cancelado los visados diplomáticos y personal de Rosario y posteriormente la embajada norteamericana confirmó la información.

Según informó la JCE, al despacho de Rosario se presentaron dos oficiales de la embajada y le comunicaron la decisión al titular de ese organismo.

La acción y la forma en que se produjo el acto ha generado críticas de diferentes sectores de la sociedad, que ven el hecho como una represalia de la legación diplomática ante diferencias con Rosario por el tema migratorio.