El alcalde electo de Boca Chica, Radhamés Castro, asumirá la función municipal el próximo 16 de agosto para emplearse en la desarrabalización de ese polo turístico de 145 kilómetros cuadrados, mediante el saneamiento de la playa, para que tenga nueva planta de tratamiento, y gestionar la construcción del malecón, el hospital que aún no tiene la localidad y el primer mercado de intercambio comercial.

Esboza la aplicación del sistema de seguridad ciudadana para combatir la delincuencia y la prostitución infantil y de adultos en la playa de Boca Chica. Prohibirá la presencia de niños en la playa a partir de las 5:00 p.m. si no están con un tutor. Empezará por encender las 4,500 bombillas que se requieren para iluminar el poblado. El abogado y

exdiputado, que dirigirá el gobierno local de 220 mil habitantes y de miles de extranjeros turistas, adelantó que abolirá la actual Policía Municipal para crear un cuerpo de vigilancia de la población, con gente joven, enlazado con el monitoreo del Sistema Nacional de Atención a Emergencias y Seguridad 9-1-1, y la Autoridad Metropolitana de Transporte (Amet). Castro, cuarto alcalde y sucesor de Daniel Ozuna, dijo que se enfocará en resolver los problemas que hacen del tránsito vehicular una calamidad.

Retomó el proyecto de la playa de Boca Chica, para señalar que es su “prioridad fundamental, por ser el elemento fundamental del desarrollo y su nombre marca a nivel nacional y mundial. La visitan unas 15 mil personas cada semana. Van a desarrabalizar cerca de 100 metros lineales de playa en los que hace más de 30 años no se hace nada.

Destacó las fuentes de intercambio comercial que generan el Puerto Multimodal Caucedo, el Puerto de Andrés y el Aeropuerto Internacional de Las Américas José Francisco Peña Gómez, estructuras separadas por menos de cinco kilómetros. Afirma que esto los convierte en especial con el eje de demanda que es la playa.

Inversión tripartita. Ante el presupuesto que ameritan las obras, Castro planea que participe el empresariado, especialmente el turístico y el comercial, el Estado dominicano por vía de la Federación Dominicana de Municipios (Fedomu) y por los ministerios de Turismo y de Obras Públicas. Los recursos económicos del ayuntamiento serán la tercera partida para las obras como el malecón y el matadero municipal.

“Estamos seguros que al presidente de la República -Danilo Medina- conocer el proyecto que he presentado, estoy seguro que nos va a ayudar con un financiamiento estatal”, aseveró.

Destacó que en los elevados de la Autopista de las Américas en el municipio se invierte cerca de US$80 millones y Turismo destina cerca de 450 millones a la vía de comunicación que conecta con la Carretera Mella y en las casetas y fritureras para las vendedoras de la playa. Además, el Gobierno aporta RD$12 millones para el edificio de la Policía Municipal y Turística. Se esforzará por atender el distrito municipal de La Caleta.

Trabajar para el esplendor. Castro describe como calamidad la arrabalización en Boca Chica, y la falta de higiene. Además del caos en el tránsito, afirma que se carece de señalización de las calles, que no tienen nombres, como tampoco tienen nombres las rutas de vehículos.

En su período de cuatro años, el alcalde se prepara para hacerle frente al fracaso que ha sido la recogida de los desechos solidos por falta de un vertedero y de puntos para la colocación de la basura que no sea frente a las escuelas ni clínicas.