Tras advertir que el casco urbano y otros sectores de Santiago han sido invadidos sin control por extranjeros ilegales que, en su mayoría, se dedican al comercio informal creando problemas de insalubridad, de libre tránsito e inseguridad, el alcalde Abel Martínez Durán prohibió todo tipo de actividad comercial dentro de los límites del municipio a los extranjeros que no posean residencia legal.
El funcionario edilicio tomó la decisión mediante una Disposición Municipal Administrativa, conforme a la Constitución de la República y la ley 176-07.
Martínez Durán instruyó a la Policía Municipal, las Direcciones de Medio Ambiente y Satélite del Ayuntamiento para que hagan efectivo el cumplimiento de la resolución.
A través del documento, el edil destaca que la proliferación y crecimiento de la inmigración de indocumentados se ha desbordado sin control ni planificación y sus consecuencias impactan significativamente la vida social, económica, comercial y cultural del municipio.
“El casco urbano y otros sectores han sido invadidos por una gran cantidad de migrantes, los cuales en su mayoría se dedican al comercio informal, lo que ha devenido en un problema social, de insalubridad, uso de espacios de manera inadecuada, falta de control e insostenibilidad económica”, expresa Martínez Durán.
“Los parques, plazas, plazoletas y otras áreas de dominio público han sido ocupadas por nacionales y extranjeros, los cuales ejercen sin ningún control actividades comerciales en carretillas y carretas imposibilitando el libre tránsito de las personas, atentando, además, con la seguridad de la ciudadanía”, destaca.
Gran problema. El alcalde Martínez Durán resalta que en estos momentos Santiago atraviesa por un gran problema con la presencia de un considerable número de extranjeros, “sin que hasta el momento se tengan estadísticas de cuál es su estatus migratorio”.