En una vida tan agitada como la que se nos exige, con las idas y venidas, el trabajo y el estrés, dejamos a un lado la buena alimentación y muchas veces comemos rápido y mal, sufriendo así  las consecuencias negativas que esto acarrea para nuestra salud.

La razón es que, aunque la mayoría de  las personas no se percate de ello, esa conducta puede afectar nuestra pared estomacal y provocar  gastritis, una afección directamente relacionada al estilo de vida y que repercute notablemente en nuestro bienestar tanto  físico como mental.

De ahí la importancia de mantener una dieta equilibrada para evitar enfermarse. Como bien se dice: “es mejor prevenir que tener que lamentar”, así que no  espere a que se manifiesten los síntomas.

La gastroenteróloga Paula Rodríguez explica que   “la gastritis es una inflamación de la mucosa del estómago, que puede tener diferentes causas. Es una enfermedad muy frecuente que, en la mayoría de los casos, se manifiesta tras una comida inusualmente fuerte, o por la ingesta de alimentos en mal estado. En ocasiones, también aparece por la toma de cierto tipo de medicamentos que pueden dañar nuestro estómago, como las aspirinas, entre otros, que incluso pueden hacer de la gastritis un trastorno crónico”.

Síntomas y tratamiento.  Alguna vez hemos sentido dolor en el vientre después de comer, pero si éste viene acompañado de náuseas o vómitos, deberemos plantearnos que posiblemente hayamos enfermado. La gastritis se caracteriza, además de esto,  por una sensación de  pesadez de estómago, pérdida del apetito, acidez, ardor en la boca del estómago o gases.  No obstante, cuando se convierte en crónica, es posible que interpretemos erróneamente que es algo normal, porque las señales serán menos intensas, aunque no por ello menos graves para nuestra salud, aclaró la doctora Rodríguez.

La buena noticia es  que, como la experta informó,  “una vida saludable, con unos buenos hábitos alimenticios e intentando huir de los aspectos más estresantes del día a día, es el mejor tratamiento de choque para evitar que este tipo de trastornos hagan mella en nuestro organismo”.

“Desafortunadamente, es prácticamente imposible controlar que todo lo que comemos esté en buen estado, por no decir lo difícil que es resistirse a ciertos manjares, aunque sepamos que pueden hacernos daño. Por eso, es importante tener en mente unas directrices básicas y muy sencillas a seguir si creemos estar enfermos. Por supuesto, si los   síntomas  son  agresivos, lo mejor es acudir a un médico”.

Si tenemos indicios de que podemos estar padeciendo gastritis, lo primero a tener en cuenta es que tendemos que  seguir una dieta específica para tratar el problema, pero, básicamente ingerir alimentos poco irritables, puesto que el estómago de por sí se encuentra irritado.