Para hablar de la edad del Listín Diario hace falta algo más que una escala de tiempo. Este medio de comunicación cumple hoy 123 años de haber sido fundado, pero la dimensión de la influencia social ejercida en ese tiempo nos da parámetros que sobrepasan el peso de la edad en años. En la historia del país y a partir de la fundación del Listín Diario, no hay un capítulo en el que este medio de comunicación no haya ejercido la influencia de su sobriedad en la información y en la opinión.

Nació pequeño, de apenas 4 por 5  pulgadas, con la vocación inicial de dar a conocer en el país el movimiento de las embarcaciones que llegaban o partían. Luego fue creciendo y diversificando su oferta informativa y de opinión hasta convertirse en un medio de gran demanda. Sobrevivió sin dobleces la ocupación militar estadounidense y combatió la tiranía de Rafael Trujillo. Las circunstancias de entonces le hicieron salir de circulación por  21 años.

Don Arturo J. Pellerano Alfau concibió este proyecto con una visión de futuro que materializó en el éxito. Hoy por hoy, la aceptación de una parte considerable del universo de lectores y anunciantes reafirma el acierto de esa visión. En esta fecha y a través de su director, Miguel Franjul, externamos nuestras más cálidas felicitaciones a todo el personal que hace posible la salida del Listín Diario.

Contra  violencia de género

A pesar de su tamaño geográfico y su gran población, la provincia Santo Domingo solo cuenta con una Unidad Especializada de Violencia de Género y Delitos Sexuales. Está instalada en la Fiscalía de la provincia y sus limitaciones de personal y equipos la mantienen desbordada por la demanda de atención por casos de violencia intrafamiliar.  En promedio, esa unidad recibe diariamente  unas 100 denuncias de mujeres que sufren maltrato físico, sexual y sicológico.

Es necesario proveer de más recursos y personal esta unidad. Hay que instalar más unidades en la provincia Santo Domingo y en el resto del país. Es imprescindible que en los hospitales públicos, la mujer maltratada reciba más que la asistencia en su salud física. En fin, la lucha contra la violencia de género no saldrá a camino mientras persistan limitaciones de personal, recursos y unidades de atención.