FILE - In this Wednesday, Sept. 17, 2014 file photo SpaceX billionaire founder and chief executive, and Tesla Motors CEO Elon Musk, is interviewed in New York. The billionaire's Boring Company tweeted Wednesday, Aug. 15, 2018, a proposal for autonomous, zero-emissions electric sleds that would run through a tunnel between the Dodger Stadium and a location in the city's Hollywood area. A proposal to build a gondola from Union Station to Dodger Stadium was announced in April. (AP Photo/Richard Drew, File)
El último año había sido infernal en lo personal para el fundador de Tesla, pero que lo peor estaba por llegar, reconoció el propio Elon Musk en una entrevista para The New York Times.
La situación ha llevado a los círculos empresariales y a las redes el debate de si Musk necesita dar un paso al costado y dejar que otro lleve las riendas de la empresa.
“Hasta ahora, la junta ha apoyado a Musk, siempre bajo un aura de todopoderoso, pero el estrés ya está pasando factura física al directivo. Al límite, ha confesado que necesita pastillas para dormir y que cada vez está más alejado de familia y amigos”, revela una publicación del diario La Vanguardia.
“Por favor, cambia la manera en que trabajas para que se alinee más con la ciencia de cómo funcionan los humanos y cómo son mas eficientes. Lo necesitas, Tesla lo necesita y el mundo lo necesita”, le planteaba en una carta abierta Ariana Huffington, cofundadora del Huffington Post y parte de la junta de Uber. La respuesta de Musk fue que no tenía mayor opción. El fundador y máximo responsable de Tesla, Elon Musk, ha respondido en la pasada madrugada a una carta abierta de Arianna Huffington en la que ésta le pide que modifique su manera de trabajar, después que este viernes el propio Musk confesara en una entrevista que trabaja 120 horas a la semana y que tanto desgaste le está haciendo pasar por un auténtico via crucis.
Musk, en un mensaje en Twitter, ha descartado tajantemente la posibilidad de escuchar los consejos de Huffington, quien en su carta le acusa de estar “demostrando una manera de usar la energía humana totalmente fuera de época, anticientífica y terriblemente ineficiente”.
Pero hay opciones. Desde la Universidad de Cornell, Charles Whitehead, profesor de derecho, apuesta por replicar el modelo que se ha implantado en la aeroespacial SpaceX, también fundada por Musk.