Argentina ha informado que está en conversaciones con el Fondo Monetario Internacional para un acuerdo de crédito “stand-by”, cuya finalización podría tardar seis semanas, mientras el banco central anunció que activó una línea de contingencia con el Banco de Pagos Internacionales.
El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, se reunió con el jefe del Hemisferio Occidental del Fondo, Alejandro Werner, el miércoles en Washington a fin de comenzar las negociaciones para la financiación que podrían durar más de un mes, dijo su oficina de prensa.
El Gobierno argentino cree que puede asegurar el crédito a una tasa de interés de alrededor del 4%, señaló el ministro de Finanzas, Luis Caputo, a la televisión TN a última hora del miércoles.
Argentina solicitará un acuerdo “stand-by” de alto acceso, según dijo el Ministerio de Hacienda en un comunicado, y añadió que los equipos técnicos están intercambiando información actualmente y que el proceso generalmente tarda alrededor de seis semanas.
Dujovne se reunirá con la directora general del FMI, Christine Lagarde, según confirmó la oficina de prensa del Fondo en un comunicado distinto que no incluía detalles sobre las conversaciones.
Dujovne también se reunirá con el subsecretario del Tesoro de Estados Unidos, David Malpass.
El FMI no hizo comentarios inmediatos sobre la declaración argentina.
Argentina ha solicitado US$30.000 millones del FMI para calmar a unos mercados preocupados por la escalada de la inflación mientras se disparan los gastos del Gobierno. La ola de ventas se expandió a los bonos, con una subida de los rendimientos, y al mercado de valores, que ha perdido más del 20% de su valor en los últimos meses.
Después de otro día de pérdidas en los mercados locales, el banco central anunció el miércoles por la noche que recibió una línea de crédito del BPI por US$2.000 millones para fortalecer su posición de reservas.
Claudio Loser, miembro fundador y director de Centennial Group Latin America y exjefe del departamento del Hemisferio Occidental del FMI, dijo que las noticias sobre las negociaciones para un acuerdo “stand-by” sugieren que se avecinan negociaciones más difíciles.
Loser dijo que espera que el FMI exija algunos cambios estructurales, tal vez más allá de lo macro.
El martes, Dujovne dijo que el país quería “una línea de crédito preventivo” con el FMI, lo cual es diferente a un acuerdo “stand-by”.
Según el sitio web del FMI, un acuerdo “stand-by” “permite al Fondo responder rápidamente a las necesidades de financiación externa de los países y respaldar políticas diseñadas para ayudarlos a salir de una crisis y restaurar el crecimiento sostenible”.
Un acuerdo “stand-by” es el préstamo que el fondo usa más comúnmente para ayudar a países con problemas de deuda.
Conlleva condiciones más difíciles que las líneas de crédito preventivas, como la que México aseguró para su uso en una emergencia.
En un acuerdo “stand-by”, Argentina se enfrentaría a revisiones periódicas de sus políticas económicas, y los tramos de préstamos sólo se desembolsarán cuando el fondo esté satisfecho con el progreso.