Cinco horas después de la llegada del equipo de la Procuraduría General de la República para ejecutar el allanamiento en las oficinas de la empresa Odebrecht, en el Distrito Nacional, aún permanecen en el lugar personal de la institución ampliando las investigaciones en torno al soborno de 92 millones que otorgó la multinacional a funcionarios dominicanos, para lograr la adjudicación de obras del Estado.

Al parqueo del edificio, ubicado en la avenida Pedro Henríquez Ureña casi esquina Abraham Lincoln, se pudo ver la llegada de vehículos con alimentos y agua que se presume sería para las autoridades que desarrollan las investigaciones, lo que da una idea de que no tienen previsto abandonar las oficinas en poco tiempo.

El Diandy XIX, nombre del edificio donde funcionan las oficinas, fue acordonado desde la llegada de los agentes especiales de la Policía Nacional, quienes arribaron acompañados de las autoridades del Ministerio Público, incluida la titular de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (PEPCA).

Se informó que en ese mismo lugar funcionan las oficinas del empresario Ángel Rondón, enlace comercial de Odebrecht en la República Dominicana y quien, según la Procuraduría, fue la persona que recibió el soborno para su posterior distribución.

El allanamiento, que de acuerdo a la Procuraduría está sustentado en orden judicial otorgada por el juez José Alejandro Vargas, coordinador de la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional, se ejecutó ocho días después del interrogatorio que se le practicó al gerente general de la empresa brasileña Odebrecht en el país, Marcelo Hofke.