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Dentro de su programa de responsabilidad social empresarial, el Banco Popular Dominicano está llevando a cabo un operativo de entrega de útiles escolares a aquellos centros educativos e instituciones sin fines de lucro.
En total, se distribuirán más de 37,000 mascotas, 3,000 mochilas y material escolar diverso.
Los estudiantes beneficiados con la entrega de estos útiles escolares superan los 9,000, repartidos entre niños y adolescentes pertenecientes a los 25 centros docentes que forman parte del Programa de Reparación de Escuelas Rurales (PRER).
Estas escuelas apadrinadas por la entidad bancaria están ubicadas en zonas de escasos recursos, formando una red dispersa por todo el país, por lo cual el alcance del material escolar distribuido tiene un impacto nacional.
Estos donativos favorecen a familias en más de 30 comunidades del territorio nacional, desde Higüey hasta Dajabón, llegando también a escuelas en Azua, Esperanza, Barahona, Nagua, San Cristóbal y Navarrete, entre otras.
Además, la distribución de útiles escolares favorece también a diversas instituciones benéficas como el Hogar Aldeas SOS Dominicanas, Inc; la fundación Fe y Alegría Dominicana; el Instituto Politécnico Loyola; las fundaciones Acción Callejera y Canillitas con Don Bosco; Hogar de Niñas y Niños de Dios, en Santiago y el Instituto Preparatorio de Menores, en San Cristóbal.
Otras entidades favorecidas son: Centro de Formación Especial P.C., en La Romana; Hogar Betesaida; Club Rotario, en Cotuí; Escuela Básica de Arroyo Frío, en La Vega; Hogar La Esperanza de un Niño, en Montecristi; y el Club de Leones, de Jarabacoa, entre otras.
Útiles escolares. En concreto, el operativo de entrega de materiales educativos distribuye 37,165 unidades de mascotas, 3,000 mochilas y otros útiles de diversos usos en el currículo escolar, como 60,000 lápices, lapiceros y crayones de cera; 6,000 sacapuntas y gomas de borrar, y 3,000 reglas.
El trabajo a favor del estudiantado menos favorecido llevado a cabo por el Popular se desarrolla dentro de su filosofía de responsabilidad social empresarial, la cual tiene en el renglón educación uno de sus puntos más sensibles.
Cada año se despliegan cientos de acciones a favor de la educación básica, media y superior, mediante la realización de programas que apoyan los valores éticos y morales, así como el talento educativo, beneficiando a miles de estudiantes y cientos de profesores.
