Bomberos exponen su estado de calamidad, que los obliga a sofocar incendios con tenis a falta de botas profesionales, llegar a las zonas afectadas con mangueras rotas, y con muchas ambulancias y camiones dañados. La situación fue planteada por intendentes provinciales que aseguran que es similar en muchas comunidades.
Una parte importante no tiene seguro médico y todos carecen de seguro de vida.
Además, sus uniformes (trajes estructurales) se les gastan y sus salarios son de miseria, en una escala de entre tres mil y cinco mil pesos al mes para la mayoría de los empleados de estas instituciones.
Estas son algunas de las precariedades que expusieron intendentes de bomberos durante el “Primer Foro Nacional «Trascendencia y Perspectiva de los Bomberos en el Siglo XXI», en el que plantearon sacar a los cuerpos de bomberos de la dependencia de los ayuntamientos. Exigen una ley que descentralice sus funciones y les otorgue autonomía presupuestaria.
La propuesta fue respaldada por el Centro de Información y Promoción Comunitario (Ciproc).
La Academia Mundial de Bomberos, que preside el mayor general Juan Gutiérrez, ofreció apoyo a los bomberos dominicanos en la celebración del acto, en el que 26 bomberos se juramentaron como miembros de la Academia.
A la actividad, desarrollada en la Universidad Católica Santo Domingo y que contó autoridades académicas, no acudió la mayoría de los bomberos invitados. De una matrícula de 158, llegaron alrededor de 50 intendentes.
Rafael Rivera, bombero y coordinador de la actividad, dijo que muchos jefes de cuerpos de bomberos se negaron a comparecer al acto y que otros no acudieron por temor a ser despedidos. Esto reveló la división que existe entre los cuerpos de bomberos, y los intereses son la causa por la que no se unifican para reclamar asistencia, equipos, salarios y establecimientos dignos para trabajar.
Denuncias. El intendente de Azua, Ángel Darío Ramírez, dijo que sus bomberos no tienen botas y las mangueras se botan. Indicó que cuando necesitan algo, salen por ayuda, más a los bomberos no los asisten los gobernadores, alcaldes, diputados ni senadores.
Expresó que continúan con los sueldos de tres mil y cinco mil pesos.
“Tanto que nos necesitan y tan poco caso que nos hacen. No nos dan valor”, se quejó. Lamentó que los jóvenes dominicanos no sientan estímulos para ser bomberos, por lo que la profesión se va quedando sin relevo, a diferencia de otros países, como en Estados Unidos, donde ser bombero es un orgullo y el Estado les paga bien y los protege. “No recibimos apoyo del Estado”.
Rafael Rivera, subintendente del Cuerpo de Bomberos de Monte Plata, dijo que en muchas partes del país a los bomberos les falta seguro de vida y médico, no tienen equipos, los que tienen están dañados. Un bombero de la provincia Samaná denunció que solo cuentan con 10 bomberos en la institución, de los que trabajan dos y ocho están en sus casas, sin embargo, más de 90 tienen carné que los acredita como bomberos sin trabajar.
El intendente de Cotuí, provincia Sánchez Ramírez, Jorge Antonio Mendoza Otáñez, reveló que existen patronatos que gestionan equipos en el exterior, para luego venderlos a los bomberos. Reclamó también que se les entregue el beneficio que les corresponde de los fondos mineros de la empresa Barrick Gold, el cual opera con patronato.
Deploró que cuando los mineros acuden a supervisar obras de infraestructura, de 15 y de 20 pisos, para comprobar si cumplen las especificaciones técnicas, no les hacen casos y los consideran una molestia.
José Alberto Díaz, de Monte Plata, fue el primero en plantear que los bomberos se independicen de los ayuntamientos.
El teniente coronel Luis Camilo Martínez planteó la necesidad de que los bomberos se unifiquen, se profesionalicen y hagan un buen uso del poder.
Jelpi Serrat, de la Academia Mundial de Bomberos, presentó parte de las conclusiones del encuentro, planteando la creación de una mesa de trabajo que propugne por la aprobación de la ley, de su independencia, de asistencia, capacitación y mejores remuneraciones.