La producción de café del país se ha reducido en más de un 70%, dejándole pérdidas a los productores por RD$18,000 millones en los últimos 4 años.
Esta información fue ofrecida por los productores de café durante una rueda de prensa, en la que recibieron el apoyo de la Confederación Nacional de Productores Agropecuarios (Confenagro), cuyo presidente, Eric Rivero, expresó que no tiene racionalidad querer excluir a los productores primarios de las instituciones que toman decisiones.
El vocero de los caficultores, Richard Peralta, director del Consejo Regulador del Comité de Valdesia del Consejo Dominicano del Café (Codocafé), atribuyó la crisis que afecta a los productores a los ataques de la Roya, la falta de atención gubernamental y a la política errática del ministro de Agricultura.
En la rueda de prensa también estuvieron los caficultores Miralis Sánchez, Cristino Lorenzo, Jorge Guerrero y Antonio Luciano, miembros del consejo del Codocafé.
Los productores de café reiteraron la denuncia de que los quieren sacar del Codocafé, al tratar de derogar la Ley que lo creó, con un proyecto que sometió el Poder Ejecutivo al Congreso Nacional para crear el Instituto Dominicano del Café (Indocafé).
Explicaron que el proyecto es casi una copia de la Ley mediante la cual se creó a Codocafé, cuya única diferencia es que el proyecto reduce a uno la cantidad de miembros de los productores en el consejo del Codocafé.
Rivero expresó que Confenagro representa el interés de los productores primarios agropecuarios del país, y por lo que se opone a esa iniciativa, “porque busca excluir a los caficultores y sus organizaciones de la instancia de toma de decisiones en materia de políticas públicas para el desarrollo de la caficultura”.
Consideró que esa iniciativa del Poder Ejecutivo es inconcebible en pleno siglo XXI, ya que todos los organismos internacionales especializados en la agropecuaria, como la FAO y el IICA, recomiendan la participación de los productores en las instituciones del Estado.
Además, indicó que prácticamente la totalidad de los institutos cafetaleros de la región tienen sus consejos directivos integrados con una mayoría de representantes de los caficultores organizados electos democráticamente por sus organizaciones.

Expresó que si se aprueba el Indocafé significaría una involución institucional sin precedentes que castraría las conquistas de democratización y representatividad logradas por los caficultores a través de Codocafé y convertirían al nuevo instituto en otra entidad parasitaria y clientelar.