Grecia-. Negociadores de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional comienzan el viernes una ronda intensiva de conversaciones con Grecia para ultimar los detalles del tercer rescate internacional al país por importe de unos 85.000 millones de euros (93.000 millones de dólares).
Atenas necesita ese dinero para seguir pagando sus deudas y mantenerse en el euro. Los enviados se reunirán con el ministro de Finanzas, Euclid Tsakalotos, tras las conversaciones entre funcionarios de menor rango durante la semana sobre la reforma de leyes fiscales y del mercado laboral.
Las negociaciones para el nuevo paquete de rescate deben concluir antes del 20 de agosto, fecha la que expira un pago de más de 3.000 millones de euros al Banco Central Europeo. Tsakalotos se reunirá con funcionarios del FMI, la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Mecanismo Europeo de Estabilidad.
El encuentro se produce horas después de que primer ministro griego, Alexis Tsipras, superara un intento de los disidentes de su partido para poner fin a las negociaciones del rescate y buscar una vuelta a la vieja moneda nacional, el dracma.
En la madrugada del viernes, el comité central de la formación de izquierdas Syriza, que rige el país desde las elecciones de enero, respaldó la propuesta de Tsipras de celebrar un congreso extraordinario en septiembre, una vez finalicen las negociaciones.
Los descontentos pretendían que el congreso tuviese lugar antes, presionando al gobierno para abandonar las negociaciones.
Tsipras perdió su mayoría parlamentaria de facto en una votación hace tres semanas, cuando casi un cuarto de los legisladores de Syriza rechazaron respaldar las nuevas medidas de austeridad. Partidos proeuropeos de la oposición salvaron el proyecto de ley y siguieron apoyando la propuestas del ejecutivo.
“Tenemos que estar de acuerdo en que no podemos seguir así”, dijo Tsipras a los miembros del comité durante una dramática reunión que se prolongó 12 horas.
Agregó que “lo absurdo de este dualismo extraño y sin precedentes” dentro de la formación debe terminar. El tercer rescate incluirá una nueva ronda de duras medidas de austeridad que volverán a castigar a un país con una tasa de desempleo de más del 25% y que se recupera de más de seis años de recesión.
También el viernes, está previsto que Tsipras comparezca en el parlamento para responder las preguntas de la oposición sobre los planes de contingencia para adoptar un sistema de pagos paralelo que podría haber facilitado una salida del euro.