Al Embajador de Canadá en nuestro país

Parte 1
En la actualidad, Canadá es uno de los países que está redefiniendo su rol en las relaciones políticas y económicas del mundo. Se destaca, entre otras cosas, por poseer una política de apertura en favor de la inmigración, convirtiéndose en uno de los principales destinos recientes de la diáspora dominicana. En estas dos entregas, hablaremos sobre su economía, relaciones comerciales, sistema de inmigración y progresividad. Para ello, nos sustentamos de los informes del FMI, OCDE, The Economist, entre otros.
Lo primero a conocer es que la postura de Canadá hacia la inmigración no es nueva. La reciente atención recibida obedece a la ola de populismo y a los movimientos antimigratorios que han tomando fuerza en otros países, especialmente, en Europa y Estados Unidos.
Un informe realizado por The Economist señala dos factores que promovieron el sentimiento pro migratorio en la población canadiense: la geografía y las políticas públicas. Canadá solo comparte frontera por el sur con Estados Unidos. No se encuentra ubicado en regiones con conflictos políticos o religiosos, por lo que no es susceptible a recibir grandes cantidades de refugiados y la migración ilegal es reducida.
Con relación a las políticas públicas, el gobierno de Canadá promueve el multiculturalismo mediante un sistema de puntos creado en el 1967. Dicho sistema, basado en méritos, permite seleccionar a personas en función no del país de origen, sino del nivel de educación, el dominio de los idiomas, experiencia laboral, edad, etc. El New York Times señala que, en el 2016, Canadá contaba con 35 millones de habitantes, de ellos cerca del 20% correspondía a minorías visibles como asiáticos (especialmente chinos), haitianos y latinoamericanos.
Para Canadá, la inmigración se ha convertido en un aspecto esencial en su crecimiento económico. Se han hecho grandes esfuerzos para atraer tanto a las firmas tecnológicas como a los inmigrantes con altos conocimientos técnicos.
Por razones impositivas, las cinco grandes compañías tecnológicas de Estados Unidos (Amazon, Microsoft, Google, Facebook e IBM) poseen cerca de 600 mil millones de dólares en reservas fuera de Estados Unidos. Y esto se debe a que después de pagar impuestos donde obtuvieron esas ganancias, si desean llevarlas a Estado Unidos, tendrían que pagar 35% de impuestos adicionales. Ahora bien, si reinvierten en otros países, no pagarían esos impuestos adicionales. Lo anterior le da una ventaja a Canadá a ser receptor de inversiones en el sector debido a la cercanía con Estados Unidos. Según un reporte del Wall Street Journal, la inversión en capital de riesgo (Venture capital) canadiense, en el 2016, fue de 3 mil millones de dólares correspondiente a un crecimiento de 37% comparado con el año anterior. Esto fortalece los denominados Hubs tecnológicos localizados en Toronto, Montreal y Ottawa.
Adicional, el gobierno canadiense ha aplicado políticas de incentivo para investigación y desarrollo con el fin de atraer a inmigrantes jóvenes y talentosos que permitan la madurez del sector tecnológico canadiense. Estas ventajas se han ampliado significativamente con las medidas antimigratorias tomadas por los Estados Unidos (Las visas especiales de Estados Unidos para técnicos fue reducida de 80 a 50 mil anuales). Cabe destacar la iniciativa del gobierno canadiense de destinar una cantidad sustancial de recursos al desarrollo de la inteligencia artificial en las universidades de Montreal, Toronto y Edmonton, promoviendo la innovación y permitiéndoles ser competitivos en otras industrias susceptibles a avances tecnológicos como el transporte, salud, servicios financieros y seguridad cibernética.
Sin lugar a dudas, la política de inmigración canadiense se destaca por el orden del proceso y el trato que se les da a los inmigrantes, motivándoles a mantener su cultura. No sorprende que países como este ocupen los primeros lugares en informes como el de Competitividad del Foro Económico Mundial que, en su versión 2017-2018, ocupa el puesto 14 de 137 países, destacándose en pilares como salud y educación primaria, donde ocupa el puesto 8. En la próxima entrega analizaremos la situación política y económica actual de Canadá.