La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) rebajó levemente su estimación de crecimiento de la actividad económica del país a 5.5%, menor al proyectado de 5.7%, según su informe Balance Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe de diciembre del 2019.
También el organismo espera un menor crecimiento para los países de la región durante 2019 y que el promedio regional sea 1,3%, comparado con el 1.7% previsto en diciembre 2018 cuando la institución lanzó su informe anual Balance Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe 2018.
Aunque en el comunicado de la CEPAL publicado ayer no detalla porqué reduce el crecimiento del país, en su último informe la entidad explica que un crecimiento inferior al 7% del 2018, es más acorde con el potencial de la economía a largo plazo, estimado en un 5,0% anual.
Además indicó que un menor crecimiento se deberá al ajuste en la postura de la política monetaria, así como a una disminución del dinamismo del sector externo.
En el Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe de diciembre del 2018, la CEPAL explicó que los Estados Unidos seguirán siendo un factor clave en el desempeño del sector de los servicios y en el flujo de remesas para el país.
Resaltó que el principal desafío en materia fiscal al que deberá hacer frente la República Dominicana en 2019 serán las repercusiones del precio de petróleo sobre el desempeño del sector eléctrico y, por ende, sobre las finanzas públicas.
Por otro lado, en el comunicado de ayer la CEPAL explica que su nueva estimación para los países de la región en el 2019 está influida por el complejo escenario externo y las dinámicas domésticas que se han venido observando en los países de la región.
Al igual que en años anteriores, la CEPAL proyecta una dinámica de crecimiento cuya intensidad es distinta entre países y subregiones, y que responde no solo a los impactos diferenciados del contexto internacional en cada economía, sino también al comportamiento de los componentes del gasto —principalmente el consumo y la inversión—que han venido siguiendo patrones distintos en las economías del norte y del sur.
Según la CEPAL, la actividad económica en América del Sur pasará de un crecimiento de 0,5% en 2018 a 1,1% en 2019. Por su parte, Centroamérica crecerá un 3,1% en 2019, con revisiones leves a la baja en la mayoría de países. Esto es consecuencia de la mayor desaceleración esperada para Estados Unidos este año, que afecta no solo al comercio sino también a las remesas que se dirigen hacia esta subregión, entre otros factores.