PEKÍN. China anunció el miércoles el aumento en un 12,2% de su presupuesto militar en 2014, una nueva subida de dos dígitos que preocupa a sus países vecinos, en especial a Japón, inmersos en varios litigios territoriales con Pekín.

El ministerio de Finanzas en un informe presupuestario presentado a la sesión anual de la Asamblea Nacional Popular (ANP) anunció para este año un presupuesto de 808.230 millones de yuanes (95.900 millones de euros, 132.000 millones de dólares) en defensa.

Buena prueba de su ambición de consolidar su estatuto de potencia militar, Pekín reforzó continuamente el gasto destinado a Defensa, que aumentó un 11,2% en 2012 y un 10,7% en 2013.

El presupuesto de defensa chino es el segundo más alto del mundo, por detrás del de Estados Unidos (632.800 millones de dólares este año, 460.000 millones de euros).

Los expertos occidentales aseguran sin embargo que los gastos militares reales de Pekín superan con creces las sumas anunciadas.

El Pentágono estimó en 2012 que China destinaba entre 135.000 y 215.000 millones de dólares (98.000 y 156.000 millones de euros) a su ejército, el más grande del mundo con 2,3 millones de soldados.

En relación a las cifras oficiales, China consagra tres veces más de fondos a defensa que India, y más que Japón, Corea del Sur, Taiwán y Vietnam juntos.

Este incremento de los medios militares chinos suscitan la preocupación de Estados Unidos y de los vecinos del gigante asiático, en particular Japón, que disputa con China la soberanía de un archipiélago del mar de China Oriental.

– Preocupación en Japón – «Defenderemos de manera decidida la soberanía de China, su seguridad y sus intereses», reafirmó el miércoles el primer ministro, Li Keqiang, durante la apertura de una sesión de la ANP (parlamento).

«Defenderemos el fruto de la victoria en la Segunda Guerra Mundial y el orden internacional de la posguerra. No permitiremos a nadie cambiar el curso de la historia», añadió en referencia a Japón.

Asimismo, Pekín «reforzará la movilización de las fuerzas y los cuerpos de reservistas», «intensificando los preparativos normales» de intervención armada, indicó Li.

El aumento del gasto chino obliga a sus vecinos asiáticos a reforzar entre ellos la cooperación en defensa, así como los acuerdos de seguridad con Estados Unidos, advirtió el experto del instituto East-Wey Center, Denny Roy, con base en Hawái.

El gobierno japonés decidió a mediados de diciembre aumentar un 5% los gastos militares en los próximos cinco años con un presupuesto de 24,7 billones de yenes (175.000 millones euros, 240.200 dólares) para el período 2014-2019.

«La transparencia, o más bien la ausencia de transparencia, de la política de defensa y de las capacidades militares de China se ha convertido en un motivo de preocupación para la comunidad internacional, incluyendo Japón», declaró el secretario general del gobierno japonés, Yoshihide Suga.