NUEVA YORK.  El grupo estadounidense Chiquita Brands y la empresa irlandesa Fyffes anunciaron el lunes su fusión, que creará la mayor bananera del mundo con unos ingresos anuales de 4.600 millones de dólares (3.300 millones de euros).

Cuando se ejecute esta operación por canje de acciones, los accionistas de Chiquita poseerán aproximadamente un 50,7% de la nueva compañía, bautizada ChiquitaFyffes, y los de Fyffes el 49,3% restante, precisaron las dos empresas en un comunicado conjunto.

Fyffes comercializa principalmente sus productos bajo la marca Sol. La operación debería cerrarse antes del final de 2014.

La nueva empresa, que se convertirá en número uno mundial de la banana y en un peso pesado en las ensaladas envasadas, el melón y la piña, estará presente en más de 70 país, con unos 32.000 empleados.

«Es una asociación estratégica natural que combina dos empresas complementarias con una larga historia y una importante reputación», subrayó en el comunicado Ed Lonergan, presidente de Chiquita, y precisó que las dos marcas se mantendrán.

«Esperamos con impaciencia trabajar con el equipo de Chiquita para construir una empresa conjunta bien posicionada a fin de tener éxito en un mercado muy competitivo y que creará mucho valor para nuestros accionistas», consideró por su parte David McCann, el director general de Fyffes.

Este último se convertirá en director general de ChiquitaFyffes mientras que Ed Lonergan ocupará el cargo de presidente. La fusión supondrá unas sinergias anuales brutas de 40 millones de dólares (28,8 millones de euros), según el comunicado.

La operación está supeditada al acuerdo de los accionistas de ambos grupos, así como a la autorización de la Alta Corte de Justicia de Irlanda puesto que la empresa, que cotizará en la bolsa de Nueva York, tendrá su domicilio fiscal en Irlanda.