Comprometidos con el mejoramiento contínuo, el Colegio Carol Morgan ofrece un excelente programa académico basado en estándares, dentro del marco de las mejores prácticas educativas sustentadas en la investigación, en las cuales los estudiantes desarrollan el carácter, la concienciación sobre los entornos naturales y sociales y las habilidades esenciales que los preparan para enfrentar los desafíos del mundo cambiante.
La filosofía y los objetivos de este centro educativo están basados en un currículo de los Estados Unidos, donde el variado cuerpo estudiantil internacional recibe un programa de inmersión en inglés.
Acoge alumnos de todos los países, a sabiendas de que esta asociación de estudiantes de diferentes orígenes y religiones les ayudará a desarrollar una clara comprensión y apreciación del mundo global en el que viven.
Diseñado para satisfacer una amplia gama de necesidades individuales, la experiencia del Carol Morgan hace hincapié en el valor y la dignidad de los estudiantes y les proporciona la oportunidad de progresar intelectual, emocional, social y físicamente a su mayor potencial.
Según datos ofrecidos a La Esquina Joven de Hoy, por Vielka Morales, Community Relations Director (directora de Relaciones Comunitarias), este centro es una comunidad de aprendizaje y de apoyo en la que los desafíos se cumplen con respeto, compasión y entusiasmo para fomentar el logro del potencial y expandir la excelencia personal y colectiva. Los estudiantes adquieren una base académica de habilidades, conocimientos y logros requeridos que los lleva a ser: global e inquisitivo; plurilingüe; seguro, motivado y consciente de sí mismo; pensador y cuestionador; valoran las perspectivas multiculturales; apto para la vida; embajador del planeta; innovador; éticamente conocedor de la tecnología; personalmente y socialmente responsable; colaborador y solucionador de problemas.
Historia. En el otoño de 1933, la hija mayor de la señora Carol Morgan y su esposo misionero, Barney Morgan, alcanzó la edad cuando necesitaba iniciar la primaria en inglés, el cual era el único idioma que manejaba. Dado que esta necesidad no podía cumplirse en el país en ese momento, y al enterarse de que había otras familias de norteamericanos en la misma situación, Carol Morgan decidió iniciar su propia escuela.
El objetivo principal era reunir a los niños para fomentar el compañerismo, la competencia y una educación sistemática. La escuela fue primero llamada “La Pequeña Escuela” o la “Escuela Calvert de Santo Domingo”, pues era el método de enseñanza que utilizaba. Originalmente funcionó en una capilla abandonada de la Iglesia Episcopal, con la señora Morgan y otras dos mujeres voluntarias como personal docente.
Comenzando con sólo cinco estudiantes y una habitación, recibieron donaciones de pizarras y materiales, siendo cada estudiante responsable de llevar su propio escritorio y silla. En 1949, Carol Morgan volvió con su familia a los Estados Unidos y en ese mismo año, en reconocimiento a sus esfuerzos incansables en la creación y operación del colegio, el mismo fue cambiado oficialmente a “Carol Morgan School”.
El crecimiento del Colegio requirió de espacios más amplios, por lo que tuvieron que mudarse varias veces. En 1964, el centro docente recibió el terreno donde se encuentra actualmente, como donación. La señora Morgan, visitó el centro en 1983 para la celebración del 50 aniversario. La dama falleció en 1993.
Acreditación Internacional. Está acreditado por Middle States Association of Colleges and Schools.
Programa de Becas. Los directivos del Colegio decidieron implementar un programa de becas para estudiantes de limitaciones económicas, denominado MNBS, por sus siglas en inglés). En tal sentido anualmente se ofrece una beca por “mérito y necesidad” a un estudiante dominicano, de excelencia académica, talentoso y motivado, de recursos limitados que cumpla con los requisitos de elegibilidad.

Con la creación de este programa, el colegio busca aportar al desarrollo integral de jóvenes dominicanos, cuyas vidas serían positivamente impactadas con la oportunidad de recibir una educación basada en la excelencia académica. Existen jóvenes estudiantes con el talento necesario para convertirse en entes de cambio, quienes sólo necesitan la oportunidad para desarrollarse y llegar tan lejos como sus sueños y capacidades les permitan, razonó Morales al referirse al impacto de la iniciativa.

Instalaciones Físicas. Cuenta con un campus de 60,700 metros cuadrados, cancha de fútbol profesional, cancha multiusos, techada; amplio gimnasio climatizado con escenario para presentaciones artísticas, salón de vídeo-conferencias con cámaras y micrófonos activados por voz, siete salones de práctica de instrumentos musicales con paredes y ventanas a prueba de sonido, amplio salón de banda, salón de coro, enfermería completamente equipada y con tres médicos, y laboratorio de filmación.
Servicio Comunitario. Desde 1986 los alumnos apoyan decenas de instituciones, donde comparten con pacientes, niños y personas de edad avanzada.
De igual modo, los estudiantes de bachillerato imparten clases de computadora a niños del Centro Comunitario 9, de Manganagua.