Comenzó ayer la aplicación de la más importante desgravación desde la entrada en vigencia del DR-Cafta, con la liberalización de 1,018 líneas arancelarias adicionales, de las que 207 corresponden al sector agroalimentario.
Esto significa que tenemos el 82% del comercio agropecuario y agroindustrial liberalizado y queda el 18% restante para el período 2020 y 2025.
La desgravación también incluye bienes que entran al mercado local en cuotas con acceso preferencial, como tocino, trozos y despojos de pollo (MDM), leche líquida, mantequilla y algunos quesos, que hoy presentan aranceles muy bajos, resultantes de un proceso de desgravación lineal y no lineal desde la propia entrada en vigor del DR-Cafta, como es el caso de las papas y algunos productos del sector cárnico que iniciaron con un arancel de 20% y quedaron sujetos a desgravación a 10 años, que terminó ayer en la categoría C, y paga ahora apenas un arancel de 2%.