Con el objetivo de aumentar la productividad y garantizar la demanda de arroz, así como enfrentar la escasez de suelo y agua disponibles para su cultivo, el Consejo Nacional de Investigaciones Agropecuarias y Forestales (Coniaf) socializa entre los productores del cereal el denominado Sistema Intensivo del Cultivo de Arroz (SICA), que revolucionará el cultivo del cereal en el país.
El director ejecutivo del Coniaf, Juan Chávez, calificó de innovador este método de siembra, ya que, respecto al método convencional, reduce hasta en un 73% el uso de semillas, y de agua en más de un 40%, lo que baja considerablemente el costo de producción y aumenta los beneficios del agricultor.
“Con esta técnica los productores se economizan un alto porcentaje de semillas, mano de obra y agua, lo que permite reducir costos y aumentar los rendimientos y la competitividad”, dijo.
Informó que actualmente el Coniaf financia y da seguimiento al proyecto “IICA/004-12CM y AC: Transferencia Tecnológica del Sistema Intensivo del Cultivo de Arroz (SICA) para la Disminución del Vaneamiento y Aumento de la Competitividad”, en las zonas de la Hacienda Estrella, Santo Domingo Este y Bajo Yuna, en coordinación con el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA).
Chávez indicó que el método SICA utiliza siembra mecanizada, con germinación en bandejas y un sustrato preparado en base a tierra negra desinfectada, estiércol vacuno y cascarilla de arroz quemada en un 25%, con un poco de fertilizante.
Refirió el caso del uso de semilla de la variedad Jaragua, en la Hacienda Estrella, provincia Monte Plata, donde la tecnología SICA utiliza 3.5 quintales para sembrar 60 tareas, con mano de obra de 3 ó 4 personas, mientras que para sembrar esa misma área, el método tradicional utiliza 13 quintales de semilla, con mano de obra de 40 personas.
Indicó que el ahorro de semillas se debe a que la sembradora solo escoge tres plántulas por golpe, mientras que con la siembra manual se utilizan hasta 25 plántulas por golpe, y que el ahorro de agua se debe a que el cultivo se desarrolla alternamente en secano y bajo inundación.
Otras ventajas del sistema SICA citadas por el director del Coniaf incluyen la uniformidad de la siembra, lo que también permite usar desyerbadoras mecánicas; aumento de la producción por unidad de área y mejoramiento de la calidad del grano, y reducción de la contaminación por el uso de abonos orgánicos, entre otras.