P: ¿Qué es la enfermedad matutina del embarazo y cómo debe manejarse?
R: Esta enfermedad es un trastorno caracterizado por náuseas y vómitos matutinos durante el primer y segundo trimestres del embarazo, y se asocia con un relajamiento del esfínter esofágico inferior debido a un aumento en los niveles circulantes de progesterona.
A pesar de que este trastorno generalmente no representa ningún riesgo para el bebé, y mejora a las 16-20 semanas del embarazo, los síntomas pueden generar estrés en la embarazada.
Inicialmente, se recomiendan cambios en la dieta y el estilo de vida para reducir la sintomatología. Para la mujer que siente mareos matutinos, se le recomienda levantarse lentamente. Además, comer algo antes de levantarse, ayuda a controlar los síntomas. Ej: un pedacito de pan tostado, galletitas de soda o un pedacito de casabe.
Otras medidas útiles para manejar este trastorno son:
1- Mantener un buen estado de hidratación, tomando frecuentes sorbos de agua fría, entre las comidas; separando durante las comidas los alimentos líquidos de los sólidos; o tomar no más de 2-4 onzas de agua con las comidas, evitando el consumo de líquidos por lo menos 1-2 h antes de las comidas 2-4 h después.
2- Comer 6-8 comidas pequeñas al día.
3- Consumir comidas ricas en hidratos de carbono (“carbohidratos”) y proteínas, pero bajas en grasas, ya que estas últimas retardan el vaciamiento gástrico de los alimentos.
4- Evitar los alimentos muy dulces y muy condimentados o con mucho aroma, ya que pueden exacerbar los síntomas. Además, deben evitarse aquellos alimentos que desencadenan los síntomas.
5- Algunas cambios en el estilo de vida incluyen: usar ropas holgadas, controlar el estrés, evitar el tabaco y las áreas de fumadores; reposar frecuentemente, ya que la fatiga desencadena los síntomas.
Algunos estudios apoyan el uso del jengibre; un suplemento muy utilizado, por su buena tolerancia y pocos efectos secundarios; aunque debe obtenerse de una fuente confiable y segura. Adicionalmente, se recomienda consumir menos de 200 mg al día de piridoxina (vitamina B6). Si los vómitos son severos se requiere de medicamentos prescritos por el médico, tales como: prometazina, ciclizina, metoclopramida, proclorperazina, etc.
La hiperemesis gravídica es una forma severa de náuseas y vómitos, potencialmente peligrosa, que afecta a 1 de cada 1000 embarazadas.