P: ¿Cuál es la utilidad de los ácidos grasos omega-3 en el tratamiento de la depresión?

R: La depresión es el trastorno mental más común en la actualidad, y resulta de un desequilibrio en neurotransmisores como serotonina, noradrenalina y dopamina, substancias que regulan la actividad cerebral y el estado de ánimo.
Para corregir este desbalance se usan medicamentos antidepresivos. No obstante, los avances científicos han permitido demostrar que la fisiopatología de la depresión es en realidad mucho más compleja, ya que la disminución de neurotransmisores se sitúa al final de una cascada de acontecimientos biológicos, entre ellos una respuesta inflamatoria que a su vez conlleva un daño oxidativo, sobre todo en los fosfolípidos a nivel cerebral.
Existe una relación importante entre el estrés y la depresión, y actualmente se sabe que los acontecimientos vitales estresantes (como situaciones de pérdida de todo tipo) alteran los mecanismos del sistema inmunológico implicados en la respuesta inflamatoria, como la producción de citocinas (Liu Y, J Affect Disord. 2012).
Por otra parte, los antidepresivos no siempre son bien tolerados, y algunos de sus efectos adversos (aumento de peso, sedación, inhibición sexual, síndrome metabólico, etc.) son incómodos y peligrosos.
En estos casos los cambios en el estilo de vida, y las recomendaciones higiénico-dietéticas, juegan un papel primordial en su tratamiento. Así, los ácidos grasos omega-3 (AGO3), en especial el ácido eicosapentaenoico (EPA) y el docosahexaenoico (DHA), representan una opción complementaria interesante, debido a su acción antiinflamatoria y su capacidad para neutralizar los radicales libres, evitando el daño oxidativo.
Además los AGO3 aumentan la síntesis de la enzima 5-hidroxitriptofano hidroxilasa, necesaria para convertir el aminoácido triptofano en serotonina (www.interpsiquis.com- abril 2018).
Los AGO3 no pueden ser sintetizados por el organismo, por lo cual se deben obtener de fuentes alimentarias (atún, salmón, arenque, sardina y nueces).
Varias guías psiquiátricas prestigiosas (Hospital Maudsley de Londres, Asociación Británica de Psicofarmacología y Asociación Americana de Psiquiatría-APA) recomiendan el uso de AGO3 en el manejo de la depresión, la esquizofrenia y el trastorno bipolar (Gándara J.J., C. Med. Psicosom, 2013). La dosis de AGO3 recomendada por los especialistas es de 1-2 gramos al día. ¡Consumir 3 porciones de pescados azules al día, nueces, frutas y granos integrales reduce el riesgo de depresión!