Entre los efectos negativos que ha ocasionado el contrabando de cigarrillos está una disminución de los ingresos fiscales del gobierno, a pesar de los aumentos de impuestos que se han venido aplicando a este producto, y un descenso del mercado legal, como consecuencia de un incremento del mercado ilegal.

Así lo establece un informe preparado por la Asociación Dominicana de la industria del Cigarro, donde se señala que la recaudación por concepto de impuestos a cigarrillos fue en términos reales un 20 por ciento inferior a lo que esperaba el gobierno.

Asimismo, indica que en valores nominales, la recaudación fue 7 por ciento menos de lo esperado.

El informe afirma que el contrabando de cigarrillos contituyen una fuente de evasión fiscal.

Los factores que ayudan al contrabando son los pocos controles fronterizos, la falta de institucionalidad, pocas sanciones, alta permisibilidad, alta carga fiscal y falta de controles portuarios.

Entre las propuestas de solución están reforzar la confiscación y destrucción de cigarrillos que estén siendo colocados en el mercado en forma de contrabando e implementar las sanciones y multas correspondientes por esta práctica ilícita.

Se considera que las sanciones desincentivarían a los agentes que participan en el comercio ilegal.

Asimismo se plantea que no se siga aumentado el impuesto, ya que se considera que mientras mayor es la diferencia de precio, el incentivo para incursionar en el contrabando es mayor. El origen de los cigarrillos que se comecializan en el país ilegalmente es de Haití y de Asia. Los de Asia llegan a la República Dominicana a través de Panamá.

El informe de la asociación plantea reforzar la regulación de los mercados binacionales.

También advierte que si no se enfrenta la situación se podría afectar el empleo que generan los productores formales.

Además, el informe plantea que el contrabando es una actividad que viene acompañada de criminalidad e inseguridad en las comunidades donde se produce el tráfico.

En el caso de los cigarrillos que provienen de Haití, que representan el 90% del mercado del vecino país, son altamente ofertado en mercados binacionales.

Agrega que esos cigarrillos tienen una participación del 60% del total del mercado ilícito en República Dominicana.

El informe explica que tanto los cigrarrillos que provienen de Haití como los asiáticos se comercializan con declaraciones falsificadas. Según señala, hay más de 20 marcas ilegales.

En resumen, el informe de la asociación que agrupa a los productores de cigarillos afirma que el contrabando incrementa el crimen organizado y provoca daños a la economía, a la sociedad y al clima de negocios.

ZOOM

Europol

Este organismo europeo plantea en su reporte sobre recomendaciones contra la amenaza del crimen organizada en Unión Europea, que “el crimen organizado se ha tornado activamente hacia el contrabando de cigarrillos, ya que es visto como una alternativa atractiva al tráfico de drogas por sus débiles sanciones y su alta rentabilidad”.

Perjudicados

El fisco y las empresas lícitas.