La Dirección de Contrataciones inhabilitó por un año a un contratista que tomó el dinero de construir una escuela para invertirlo en otras obras públicas.
Se trata del ingeniero Ramón Antonio Inoa Núñez, quien en 2013 ganó mediante sorteo la construcción de la Escuela Básica Boca de la Toma, ubicada en Cambita Garabitos, provincia San Cristóbal, por un monto de RD$38.5 millones, lo cual debió hacer en ocho meses.
Sin embargo, en agosto del 2015 la obra apenas tenían un 11% de ejecución a pesar de que se había cubicado RD$9.7 millones además de que el ingeniero tenía una deuda de línea de crédito RD$15.0 millones.
En noviembre del 2015, Inoa envió una comunicación a Rodolfo Guzmán, director del Programa de Edificaciones Escolares, en la cual argumentó que cuando recibió el avance aún el diseño de la obra no estaba listo lo que hizo consumir un largo tiempo en espera.
Y que al momento de recibir dicho avance, tenía contratados proyectos en otras instituciones, como Inapa e Imdrhi, “y confiando en mi gobierno y los funcionarios de esas instituciones, decidí invertir el dinero de la escuela para dinamizar esas obras de gran prioridad”.
Asimismo pidió tiempo para reiniciar la escuela cuando le pagaran las demás obras, lo cual fue rechazado por el Ministerio de Educación, que rescindió el contrató y solicitó su inhabilitación ante Contrataciones, la cual la acogió sin menoscabo de los compromisos del Estado con él anteriores a la sanción dictada el 19 octubre de 2018.