La Convergencia por un Mejor País saludó esta tarde el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Cuba.
«El intercambio de prisioneros entre ambos países agrega una dosis de cálido humanismo a este hecho de profundo contenido político internacional», señaló en un comunicado.
La Convergencia manifestó que la decisión alcanzada por ambos gobiernos, después de arduas negociaciones, traduce un anhelo democrático universal, pues en cada una de las sesiones de las Naciones Unidas las votaciones a favor de esa apertura y del cese del bloqueo han sido prácticamente unánimes y se han reiterado por más de 10 años consecutivos.
«El presidente Barack Obama reconoció la inutilidad de esa vieja política para cambiar el modelo político cubano que sigue siendo un asunto interno y de libre albedrío inherente a su autodeterminación. Hay que admitir, sin embargo, que ha sido un gesto pertinente y audaz motivado por una opinión estadounidense cada más favorable al cese del bloqueo», dijo la organización.
Apuntó que, en el fondo, la decisión del gobierno norteamericano es un reconocimiento a la resistencia de Cuba por más de 50 años.