La compañía experta en cruceros de lujo Crystal Cruises asalta el cielo y comenzará a operar vuelos privados en aviones Boeing 777-200LR y Boeing 787-8 Dreamliner que se convertirán en auténticos aviones VIP.

Según informa la publicación especializada Evasión, el objetivo de Crystal Cruises es trasladar el saber hacer de la compañía de cruceros de lujo a la cabina de un avión. Así, está previsto convertir los dos aviones comprados en auténticas suites de lujo para un grupo reducido de huéspedes. Operados bajo la marca Crystal Luxury Air, los vuelos comenzarán en 2017.

El gigante avión de doble pasillo 777-200LR será rediseñado para dar capacidad únicamente a 88 personas con butacas de primera clase, convertibles en cama, un salón elegante y una zona bar.

El otro gigante de doble pasillo Boeing 787-8 Dream- liner, por su parte, será trasformado en un avión para 53 exclusivos clientes, el Dreamliner habitualmente tiene capacidad para un pasaje de 300 personas.

Crystal Cruises todavía está a la espera de conseguir un socio externo que se encargue de supervisar todos los aspectos aeronáuticos de esta flota de aviones. El resto de personal, como mayordomos, pilotos y resto de la tripulación dependerá de la compañía de cruceros.

Esta no es la primera ocasión en la que compañías dedicadas al turismo deciden emprender nuevas iniciativas en el sector aeronáutico. Four Season o Abercrombie ha ralizado operaciones de este tipo. Sin embargo, Crystal Cruises es de las primeras en adquirír los aviones y operar bajo su propia marca, Crystal Luxury Air.

La famosa cadena hotelera Four Seasons ya había aprostado por crear un avión hotel que cuenta con todas las comodidades y servicios de sus hoteles más lujosos. Se trata de un avión privado, decorado con exquisito gusto hasta el más mínimo detalle. Es un Boeing 757 que puede presumir de tener los acabados más lujosos que se pueden imaginar.

El restaurante en los aires ofrece exactamente los mismos servicios y con la misma calidad que cualquiera de los restaurantes Four Seasons. Es decir, vajillas lujosas e impecables para servir platos de alta cocina. Incluso la mantelería está pensada para sorprender a cualquiera que pise este avión.

Pese a su elevadísimo precio, los viajes en este jet han alcanzado altos niveles de cupación. Su itinerario llamado Backstage with the Arts, recorre las principales capitales europeas.

En cada escala se ofrece alojamiento en uno de los hoteles Four Seasons y todo está incluido: comidas, estancia, vuelos, etc. El viaje cuesta un mínimo de 61.000 euros. A partir de este precio, los importes pueden subir en función de lo que el cliente necesite. En el caso de que una persona opte por realizar un viaje alrededor del mundo el coste no bajará de los 106.000 euros por persona.