La conjuntivitis es relativamente frecuente dada la facilidad para el contagio: este se favorece al tocarse los ojos con las manos.

En los niños, padecer conjuntivitis es motivo suficiente como para acudir al pediatra y seguir sus consejos sobre qué medicamento, sea colirio o pomada, aplicar.

Prevención. Una vez que se haya solucionado el problema, y si tu hijo padece la llamada conjuntivitis de repetición, existe una planta para ayudar a prevenirla: la eufrasia. Una planta con propiedades antiinflamaciones y antisépticas muy interesante a la hora de tratar problemas de conjuntivitis, blefaritis, etc…

Se ha demostrado la efectividad de los baños oculares con infusión de eufrasia. Prepara un colirio casero calentando medio litro de agua en el que echaremos una cucharada de esta hierba. Calentar el agua sin que llegue a hervir durante 10 minutos y después dejar que repose otros 10. Colar y una vez que esté frío se aplica con compresas o algodón para darnos baños oculares.

También puedes utilizar la popular infusión de manzanilla, con efecto antiinflamatorio, que aliviará todo el contorno ocular.