Dentro de las innovaciones que trae el programa semanal Proceso, que produce Danny Alcántara y que se transmitirá por Color Visión (Canal 9), desde el domingo 22 de este mes, está la aparición de sólo una figura en el set.
Danny Alcántara, el productor y conductor, será la única persona frente a las cámaras. La decisión está fundamentada en varios estudios que avalan la credibilidad del comunicador y el nivel de aceptación entre los televidentes.
El programa cambió su línea gráfica y la conducción. Lo voy a conducir yo, teniendo el cuidado de no abusar de mis exposiciones durante la hora del espacio. Tendremos apoyo fílmico, reportajes, vídeos con las historias más impactantes de la semana y las noticias del día. Contamos con un equipo que producirá en nuestras oficinas todo el programa, señaló el periodista nativo de San Juan.
Adelantó que Proceso tendrá una nueva escenografía, basada en elementos modernos y muy apropiada para el tipo de producción a a la que servirá de plataforma. Dijo estar gratamente sorprendido del nivel de solidaridad de los anunciantes y patrocinadores de Proceso, ya que la totalidad de ellos ha confirmado su continuación en el espacio, ahora por Color Visión. Aseguró que se propone presentar una oferta con una mayor calidad, cuidando siempre mantener la preferencia del público y la característica del programa. Indicó que la sencillez y la claridad de los planteamientos son de las ventajas de Proceso, y eso se mantendrá intacto.
Ahora espero llenar un vacío profesional que venía arrastrando durante todos estos años en Telemicro, como consecuencia de las responsabilidades como director de prensa del grupo, expresó Danny.
Agregó que espera como siempre el respaldo de la teleaudiencia que le ha seguido desde que se inició en el periodismo en 1982.
El comunicador laboró para Radio Continental, Radio Central, Telenoticias (Canal 11), Rahintel en las Noticias, Telemicro y para las cadenas Eco y Telemundo. JR
Las frases
Danny Alcántara
Ahora dispongo de un tiempo mayor para dedicarlo a producir el programa que realmente quería hacer.
Antes dedicaba el 80 por ciento de mi tiempo a responsabilidades ejecutivas, que si bien es cierto que reportaban beneficios apreciables, me dejaban un vacío profesional.