Hablar de David Ortiz, escribir sobre su carrera es algo especial en este momento. Quien suscribe lo siguió desde sus primeros pasos en la liga dominicana con el Escogido.
Ortiz con su gracia, sonrisa y desenvolvimiento en el terreno de juego se ganó el corazón hasta de los fanáticos de los Yankees, algo fuera de serie en el béisbol de Grandes Ligas.
Ganar tres coronas con Boston, ser parte de la primera y Jugador Más Valioso en la serie, donde sus batazos definieron encuentros, pone a David en una élite de jugadores latinos que han pasado por el béisbol.
La franquicia de Boston, una de las más aristocráticas del béisbol, se rindió a los pies del dominicano. Le dieron el honor de que el expreso que pasa por el Fenway Park se llame David Ortiz Drive, algo especial para un jugador latino.
Rod Carew se llama una de las calles que bordea el estadio de los Mellizos de Minnesota, para poner un ejemplo de que David está entre los grandes.
Ya comparado con figuras como Larry Bird y Roger Clemens en Boston, David se va con una carrera llena de éxitos y logros fuera y dentro del terreno de juego. Su fundación, quizás no tan conocida, ha salvado cientos de niños con problemas de corazón. Además de buen jugador es uno de los grandes filántropos que ha pasado por el juego de béisbol.
Su mayor grandeza por lo que siempre será recordado el Big Papi: finalizar su carrera con 40 años de edad y grandes números en remolcadas y jonrones, además de meter a su equipo en playoff y favorito una vez más para ganar otra corona.#GraciasBigPapi.