Luis de León es de esos dirigentes políticos y educadores, escasos en estos tiempos. Ejerce con pasión sus vocaciones. Por ello está presente en todas las actividades vinculadas a ambos ámbitos, y sobre todo su activismo es más visible cuando se trata de enaltecer los valores patrios y los lineamientos gubernamentales de su partido, dirigidos para alcanzar la calidad educativa.
De León, miembro del Comité Central del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), tiene más de 40 años como educador y el próximo mes cumplirá 20 años desempeñándose como viceministro de Educación.
Desde 2012 es viceministro de Educación de Gestión y Descentralización de Centros.
Se define como un discípulo del profesor Juan Bosch y por esa razón se le observa permanentemente enarbolando los ideales y los principios boschistas a través de sus escritos y discursos.
Precisamente en honor a su líder político hoy fallecido, recorrió todo el país dictando la conferencia titulada: “Paradigmas Históricos de la Revolución Educativa”, en la que explica cuáles son esos grandes maestros de la Patria.
Considera que la actual “revolución educativa” del presidente Danilo Medina identifica a los grandes maestros de la Patria como Eugenio María de Hostos, padre de la educación dominicana; el profesor Juan Bosch, “el gran maestro moral de la nación”; Ercilia Pepín, Salomé Ureña de Henríquez, Urania Montás, Emilio Prud’homme, entre otros.
De León, presidente del movimiento Fuerza Boschista, como educador es de los que piensa que se debe mantener la memoria histórica del pueblo dominicano.
Por ello desarrolla permanentemente actividades vinculadas a los hechos patrióticos, resaltando las proezas de los hombres y mujeres que han sido ejemplos morales y de dignidad del país.
Con licenciatura en Educación en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), academia de la cual es catedrático; maestría en Educación y doctorado en una universidad de Cuba sobre Administración Educativa, el docente dice estar dispuesto a seguir aportando porque el sistema educativo alcance la calidad requerida.
Asegura que la revolución educativa está en marcha, aunque reconoce que se deben continuar desarrollando políticas como la formación y capacitación magisterial, y el uso de la tecnología en el proceso enseñanza aprendizaje. Dice que tiene la voluntad de crecer, pero conteste de que eso depende de las circunstancias y del Presidente.
Por 10 años De León fue ejemplo de cómo se gestiona un centro. Recibió reconocimiento del Gobierno argentino por su buen desempeño como director del liceo República de Argentina.
Destaca el gran trabajo que se hace desde el Viceministerio de Gestión y Descentralización de Centros, en el que se invierten anualmente más de 5 mil millones de pesos.