La joven diseñadora Ana Moreno conoce el significado de trabajar bajo presión para una súper estrella. Sabe lo que es amanecer en un atelier cosiendo y salir a tomar un taxi para llevarle al estilista de la celebridad el traje para su próximo show.
Esta y otras valiosas experiencias vivió esta dominicana en el atelier del diseñador Asher Levine en Nueva York, donde comenzó durante su ultimo año en la universidad y a quien considera su mentor. A su lado trabajó en diseños para Rihanna, Demi Lovato y Nicki Minaj.
“Aquí aprendí que este mundo no es color de rosa como la gente piensa, que creen que todo es glamoroso y bello. Más bien la industria de la moda no tiene hora, era raro el día que salía a las 8:00 de la noche, lo normal era quedarnos confeccionando los vestuarios hasta las 4:00 de la mañana, porque casi todos los pedidos que recibíamos de los artistas eran a último minuto”, recuerda Moreno.
Aunque es una vida sacrificada, sus 22 años le dan para disfrutarlo y mucho más, porque considera que ahora es que le falta crecer y aprender en esta industria a la que supo que se dedicaría desde los ocho años, cuando dibujaba trajes inspirada en las tendencias que veía en Punta Cana, donde vivió su niñez por el trabajo de sus padres.
Además, Moreno conoció la otra cara de la moneda, a los 13 años fue descubierta como modelo y ganó un concurso que la llevó a desfilar en las pasarelas internacionales.
Su amor por el mundo de la moda siguió creciendo y cuando terminó el bachillerato no lo dudó, se matriculó en diseño de moda.
Continuó destacándose y ganó el “Dedal de Oro” en 2015, en la Escuela de Diseño de Altos de Chavón; luego siguió estudios en Parsons The New School for Design, donde se graduó como diseñadora en 2017.
Desde entonces se encuentra radicada en Nueva York, donde ahora trabaja para la compañía Cyrus Knits y al mismo tiempo en el nacimiento de su marca.