El presidente de la Confederación Autónoma Sindical Clasista (CASC), Gabriel del Río Doñé, respaldó ayer que el 80-20 se mantenga en el Código de Trabajo, aunque cree que se deben buscar fórmulas para resolver el problema en algunos sectores, como la construcción y la agricultura, donde la presencia de mano de obra haitiana es mayoritaria.
“Si no hay mano de obra hay que permitir que los extranjeros hagan el trabajo, pero hay que buscar fórmula para incentivar al dominicano a trabajar en la construcción y el campo”, dijo al ser entrevistado en la sede de la entidad.
Sostuvo que el Ministerio de Trabajo debe aplicar la ley contra los empresarios que violan la proporción de extranjeros que pueden laborar en el país.
Sin embargo, precisó que la aplicación de la ley no implicaría que se tenga que parar una construcción.
De acuerdo con el 80-20, el 80% de la mano de obra debe ser dominicana y la restante extranjera.
Consideró que hay que hacer posible que haya más trabajadores dominicanos en la construcción.
Del Río Doñé consideró que se debe estimular para que los jóvenes dominicanos trabajen en la construcción y en la agricultura, para lo cual se deben mejorar los salarios.