En el PRD ha hecho falta el dedo mágico de Peña Gómez.
En julio de este año, Doña Ivelisse Prats celebrará el triunfo de la vida: cumplirá 80 años. Pero tiene otro motivo para festejar un acontecimiento memorable: su permanencia en el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), organización política en la que ha militado, a tiempo completo, en cuerpo y alma, durante 50 años. Llegó el 26 de julio de 1961, y ahí se quedó.
Una tarde de finales de julio, recién llegado el PRD de un largo y tortuoso exilio su amiga y ex alumna, Carmen Miolán (Nina), le dijo: Ive, como tú has mostrado interés en inscribirte en el PRD, vamos a inscribirte en el partido. Y doña Ivelisse, sin titubeos, estampó su nombre en el partido blanco. Nina, hija de Don Angel Miolán, apenas tenía entonces 16 años y se sintió contenta. Así se lo manifestó a la amiga de ambas, Clara Rodríguez Demorizi.
Es una perredeísta pragmática, una dirigente con un formidable trabajo de base en su partido. Ha fragmentado el tiempo, a lo largo de cinco décadas, para ser maestra, dirigente gremial, activista política, escritora, esposa, madre, ama de casa, abuela y bisabuela. Hace muchísimos años que eliminó de su agenda la palaba vacaciones.
Su trayectoria, su mística de trabajo, la coloca junto a un selecto grupo de damas dominicanas extraordinarias. Ella es de las mujeres en el tiempo, mujeres sin tiempo. Alcanzó la categoría de dirigente en 1974, cuando el doctor José Francisco Peña Gómez la escogió, por sus méritos políticos acumulados, para el Comité Ejecutivo Nacional (CEN). Fue la primera mujer latinoamericana en ser electa presidenta de un partido, el PRD, en 1979. Ganó abrumadoramente la Convención Nacional. Ocupó esa posición hasta 1982. Ha estado en tantas y distintas comisiones del partido blanco que perdió la cuenta.
Desde 1979, año en que participó en la corriente interna que encabezaba Jacobo Majluta, doña Ivelisse se mantiene fuera de grupos, tendencias y/o corrientes del PRD, incluso del Bloque Institucional Socialdemócrata fundado por el extinto líder, José Francisco Peña Gómez, quien fue, junto a Juan Bosch, maestro político e ideológico que orientó su acción partidaria. Junto a Hatuey de Camps, Leonor Sánchez Baret y otros, logró la histórica reunión del CEN que mantuvo la legitimidad del partido y culminó en la unidad partidaria.
Su labor fundamental durante los últimos 25 años de intenso trabajo político ha sido aprender, enseñar y difundir el Socialismo Democrático, y la Tesis del Gobierno Compartido del Doctor José Francisco Peña Gómez.
No es una vieja honorable, ni una figura notable, sino una mujer que, con su trabajo, se ha ganado un sitial en el PRD y en la sociedad dominicana. En broma, acepta que le digan terca, pero ella se considera, no un Roble, sino una vieja Caoba del perredeísmo histórico. Es la mamá doc del partido que, desde el exilio en Cuba, combatió la feroz y sangrienta tiranía trujillista.
Dirigente gremial, dos veces diputada, primera directora de la escuela política y vicepresidenta del departamento de educación del partido, la legendaria dirigente del perredeísta tiene, sin lugar a dudas, motivaciones de sobra para celebrar. A las memorables fechas de su ingreso al PRD y su cumpleaños, agregará 60 años en el magisterio y algo más, una virtud esencial en su vida, y cardinal para cualquier político de su edad: La coherencia. Tengo razones válidas para festejar en julio de este año este triple cumpleaños.
He militado y he votado solo mi partido, El PRD. Soy, he sido y seré siempre una perredeísta sin vacaciones. En mi vida de militancia política nunca me he sentado en mi casa descansar, a tomarme unas vacaciones que quizás he merecido. De mis 50 años de militancia, por lo menos en los últimos 30, no he militado en ningún grupo ni corriente del partido.
Su labor en el PRD ha sido incansable, meritoria. Siempre ha estado presente en los momentos de dificultades. Es una dirigenta a tiempo completo. En cinco décadas de militancia activa, ha superado múltiples dificultades y contratiempos, incluso de salud, pero siempre dice presente cuando se la necesita. Como recompensa a su ardua labor política, se ha ganado el respeto, la admiración y el cariño de sus compañeros, de dirigentes de otras organizaciones políticas y de las bases perredeístas, con las que mantiene contacto permanente.
Mujer política
En marzo de Marzo 1970, doña Ivelisse representa a los profesores y profesoras perredeístas en la fundación de la Asociación Dominicana de Profesores, (ADP). Fue electa presidenta. Cuatro años más tarde pasa formar parte del CEN, tareas que compartió como miembra de la Comisión Política del PRD, y Directora del Departamento Nacional de Educación.
Para Septiembre de 1978 fue nombrada Dirección de la Primera Escuela de Cuadros del PRD, auspiciada por la Fundación Friedich Ebert. Ese mismo año salió electa Diputada por el Distrito Nacional. Al año siguiente fue elegida Presidenta de la organización.
En 1982, renuncia a la Presidencia del partido por haber sido nombrada Ministra de Educación, en obediencia a la incompatibilidad consignada en el Estatuto del Partido. Posteriormente, en el 87 fue designada Directora del Departamento de Asuntos Culturales y Magisteriales del PRD, posición creada por el partido blanco. Duró un año. En 1988 asume nuevamente la Dirección del Departamento de Educación.
En las elecciones de 1994 fue Regidora por el PRD en Distrito Nacional. Dos años más tarde, en 1996: doña Ivelisse es elegida Secretaria Nacional de Educación y Doctrina, organismo creado por la fusión de los Departamento de Educación y Doctrina. Actualmente ocupa esa posición.
Elegida diputada por el Distrito Nacional en 1998 Distrito Nacional, doña Ivelisse Prats Ramírez de Pérez ha Representando al PRD en numerosos encuentros internacionales y ponente en diversas asambleas y conferencias de la Internacional Socialista.
Más responsabilidades políticas
Cinco décadas de trabajo político parecen no ser suficiente para esta incansable mujer. La señora Prats de Pérez actualmente, además de ejercer las funciones como Secretaria Nacional de Educación y Doctrina, se desempeña como Directora de Asuntos Académicos del Instituto de Formación Política Doctor José Francisco Peña Gómez. Y miembra de la Comisión Organizadora de la XXIX Convención Extraordinaria del PRD. Tiene el honroso honor de haber sido miembra de la Convención Nacional en por lo menos 9 convenciones del PRD.
Doña Invelisse es miembra del Foro Renovador, corriente de reflexión, opinión y acción no electoralista, en la cual impulsó recientemente la exitosa celebración del Congreso partidario Doctor José Francisco Peña Gómez.
Se mantiene ocupada en sus tareas políticas. Ella imparte clases, organiza seminarios, y escribe. Varios de sus materiales sobre el tema son usados como textos de estudiantes en los cursos regulares que ofrece el PRD.
La Protagonista
Ivelisse Prats
Educadora y politica
Doña Ivelisse Prats Ramìrez tiene 50 años de militancia ininterumpida en el Partido Revolucionario Dominicano (PRD). Es una dirigente de base allegada al extinto lìder del partido blanco, doctor Josè Francisco Peña Gòmez, quien la llevò al Comitè Ejecutivo Nacional (CEN) en 1973. Ha fragmentado el tiempo para ser militante activa, esposa, educadora, escritora gremialista, madre, abuela, bisabuela y ama de casa.