Periodista “Muchos periodistas redactan  con faltas ortográficas y  escriben noticias cojas”
Santiago Estrella Veloz no tiene que esforzarse mucho para escarbar en su memoria y rememorar la época dorada en que se inició como periodista.  Él, simplemente, remueve la superficie de sus recuerdos: “Ese fue un período muy significativo. Uno trabajaba con un entusiasmo inusitado, con vocación, con un ideal para lograr conquistas a favor de la comunidad, de la sociedad”.

Fue, quizás, la época de las satisfacciones en el ejercicio de la profesión periodística, porque quienes ejercieron con entrega y dedicación en la etapa post-trujillista sentían un alivio indescriptible cuando la única recompensa que recibían de una buena crónica o un reportaje de profundidad denunciando problemas o males sociales, era la solución rápida del problema o una simple felicitación. Así de simple

“Era una satisfacción enorme la que  sentíamos.  Las cosas son diferentes. Ahora el periodismo se ha mercurializado, a tal punto que observo a muchos jóvenes, a quienes impartí docencia, que son multimillonarios, ricos de verdad. El otro día me asombré de que un joven periodista que ganaba quince mil pesos, cuyo nombre omito, me dijo que había adquirido al contado un apartamento de un millón y pico largo de pesos. En mis 50 años de ejercicio periodístico nunca he visto esa suma de dinero”. 

Estrella Veloz, quien se inició en la carrera en 1962,  se vanagloria y enorgullece de las enseñanzas de algunos de sus profesores, entre los que menciona a  Freddy Gatón Arce y el historiador don Vetilio Alfau Durán. Esos fueron buenos tiempos.

Se suma a los críticos de los periodistas que a diario escriben  “con faltas ortográficas, que escriben noticias cojas”, profesionales que no se ocupan de leer ni siquiera los editoriales de los periódicos donde laboran, de leer libros de periodismo, de historia, geografía, de prepararse para enfrentar exitosamente la vida. Como veterano y buen periodista, Estrella Veloz lee los diarios con un bolígrafo a mano. Anota las faltas e incoherencias periodísticas. “Me llamó la atención una crónica de un colega que escribió sobre el cólera. Habló de que hay miles de sospechosos de casos de cólera, pero en ningún párrafo dijo cuántas personas han muerto por esa causa. Entonces, o es parte interesada en ocultar la cifra, o no tuvo la iniciativa de preguntar”.

“Algunos periodistas escriben crónicas políticas y dicen que la situación  llegó a su  punto álgido porque se enfrascaron en una discusión terrible. Emplean la palabra álgido como sinónimo de tórrido. Álgido es muy frío y tórrido es muy ardiente, caluroso”.

Esos errores, según Estrella Veloz, contribuyen a confundir y  embrutecer a los lectores de diarios “porque muchas personas, especialmente jóvenes, comienzan a emplear esas palabras sin conocer sus significados”. La agravante es que la radio y  la televisión se nutren de informaciones de la prensa escrita.

“Aquí hay periodistas de  prestigio que no saben diferenciar una novela corta de un ensayo. Si tú le preguntas sobre historia o geografía dominicana, no saben nada.  Uno ve cosas tan penosas en esta profesión”.

Algunos tienen dos y tres títulos universitarios, post-grado y maestría, “pero dale una computadora y déjalos escribir. Dile hazme un perfil, una semblanza de un personaje; escríbeme una crónica de ambiente o un buen reportaje. No saben, porque no se ocupan de superar esa etapa”.

Cualidades periodísticas. Para Estrella Veloz, de 69 años, el ejercicio periodístico honesto conlleva una serie de cualidades, comenzando por un “sentido de dignidad, para lo cual se necesita una formación ética que no aparece en las universidades.  Eso proviene del hogar”.

“El periodista tiene que ser objetivo, lo más que se pueda, presentar todas las aristas de una situación, sin pretender que lo sabe todo. Aquí hay mucha gente, en todas las profesiones, que cree que lo sabe todo. Uno nunca acaba de aprender, mucho menos en nuestra profesión”.

Se requiere, como una cualidad para el ejercicio periodístico, tener una cultura general “porque si no la tiene no puede comparecer a un programa de televisión a hablar sobre determinados temas, porque mete la pata”. Refiere una anécdota de un periodista dominicano que le preguntó a un personaje venezolano si República Dominicana pertenecía al Pacto Andino. ¡Qué burrada!

Estrella Veloz entiende que no todo está perdido. Parte de una generación de jóvenes periodistas ejercen y se preocupan por prepararse. “No todo es negativo. Estos muchachos valiosos se abren campo para enfrentar los desafíos”.

“Creo que a esos jóvenes periodistas hay que ayudarlos, orientarlos, enseñarles lo que uno sabe. No se puede ser mezquino. En mi caso, he actuado diferente y ayudo a todo el que me necesita, orientándolo o regalándole libros de periodismo”. 

Ejercicio periodístico

1962 

Ingresa como “aprendiz de periodista” en La Nación, donde al mes logró ser el mejor remunerado de la redacción por sus excelentes notas periodísticas. De esa etapa, y su posterior ingreso al Listín Diario, recuerda a  Juan José Ayuso, Luis Ovidio Sigarán, Félix Acosta Núñez, Vicente Estrella Pimentel,  Oscar Gil, Guido Félix,  Héctor Wenster, Napoleón Leroux y Reginaldo Atanay.

1963

Ingresa al Listín Diario, bajo la dirección de  Rafael Herrera. En ese periódico trabajó  20 años, hasta su promoción como Jefe de Redacción del vespertino Última Hora, donde permaneció tres años.

Durante siete años ocupa la Gerencia de Relaciones Públicas del Consejo Nacional de Hombres de Empresa (CNHE), hoy Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP).

1975

Ganador del Premio Nacional Shell de Periodismo.

1991

Retorna al Listín Diario como Editor Asociado, cargo que ocupó hasta 1995, para continuar como corresponsal  de la agencia norteamericana de prensa United Press International (UPI), con la cual trabajó durante 20 años en dos períodos alternados. Ese año ganó el primer lugar del Premio de La Principal de Seguros, por una serie de 50 artículos publicados en el Listín Diario sobre “La agonía y muerte de los ríos”.

2002

Galardonado con el Premio Internacional Chapultepec de Ensayo, otorgado por la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), por su Ensayo “La libertad de prensa no es un regalo”.

Estrella Veloz también ha recibido diversos reconocimientos nacionales e internacionales por su labor periodística.