La acusación de la Procuraduría General en el caso Odebrecht indica que un contrato simulado que sirvió como fachada para disfrazar los pagos de sobornos que le hizo Odebrecht al exministro de Obras Públicas, Víctor Díaz Rúa, fue lo que metió al abogado Conrado Pittaluga Arzeno en el espinoso conflicto.
Sus relaciones contractuales iniciaron en el 2007, cuando Pittaluga Arzeno asesoró a Díaz Rúa para cambiar la modalidad del contrato del proyecto de construcción de la Autopista del Coral “de una obra pública-privada, a una obra pública”, bajo el argumento de que de esa forma sería más fácil financiarla.

Fue así como ambos terminaron beneficiados de manera dolosa con la obtención de sobornos de los que distribuía la constructora brasileña Norberto Odebrecht, a través de su representante Ángel Rondón, para gestionar contratación de obras de infraestructura en la República Dominicana, según el sometimiento que les hizo el Ministerio Público.

La actuación de Pittaluga fue tan efectiva, que en el 2008 logró que Odebrecht aceptara pagarle el 1.25% del valor del contrato, equivalente a US$6,629,080.00, por una asesoría legal.

Para dificultar el rastreo del soborno, Odebrecht le exigió al exfuncionario y a su abogado la adquisición de una compañía offshore, y Pittaluga Arzeno adquirió a Newport Consulting LTD, con sede y cuenta bancaria en Antigua y Barbuda.

A través de esa compañía, existente solo en papeles, en el 2011 fue que Odebrecht transfirió a favor de Pittaluga Arzeno los US$6.6 millones por supuestos servicios legales, fraccionados en siete transacciones en cuenta corriente del Meinl Bank. Posteriormente, en la misma cuenta de Newport Consulting, depositaron más de US$4 millones para Díaz Rúa.
El expediente dice que otra sociedad utilizada por Pittaluga Arzeno para hacer transacciones financieras aportadas por Odebrecht fue Aragon Business Consulting, a través de la cual recibió US$3,015,000.07 de parte de Odebrecht.
Y añade que para hacer llegar los recursos al exministro, la empresa de Pittaluga Arzeno hizo inversiones en compañías vinculadas a Díaz Rúa, donde los fondos se fusionaban con otros capitales en inversiones inmobiliarias o de trabajos relacionados con la construcción.
Entre esas compañía figuran Indoquipesa S.R.L., a través de la cual el abogado hizo una inversión de unos US$400,000, cuyo retorno sería a través de unos apartamentos en el edificio GG No. 26; y Constructora Solaris S.A.S.
El documento de la Procuraduría General consigna que Indoequipesa fue constituida en el 2011 (después de iniciados los pagos de Odebrecht a Newport Consulting) por Leonardo José Guzmán Font-Bernard, yerno de Díaz Rúa, y a quien Pittaluga Arzeno había designado como Comisario de dos cuentas que tenía abierta en el Meinl Bank de Antigua, a nombre de su empresa offshore.