Monseñor Santiago Rodríguez fue ordenado como nuevo obispo de la diócesis de San Pedro de Macorís y Hato Mayor, durante una misa que contó con la presencia del presidente Danilo Medina.
El rito de ordenación, realizado en el polideportivo de la Universidad Central del Este, estuvo presidido por monseñor Gregorio Nicanor Peña Rodríguez, obispo de la diócesis de La Altagracia y ordenante principal; monseñor Francisco Ozoria Acosta, arzobispo de Santo Domingo, y monseñor Julio César Corniel Amaro, obispo de Puerto Plata, quienes fueron co-ordenantes.
Al acto, organizado por laicos y el clero petromacorisano, asistieron los miembros de la Conferencia del Episcopado Dominicano así como sacerdotes, diáconos, religiosas, autoridades gubernamentales, militares y representantes del empresariado.
El monseñor Santiago Rodríguez dijo que asume la posición de obispo con alegría, entusiasmo y humildad.
Asimismo expresó que se entrega con espíritu de humildad y servicio para caminar y acompañar junto con los sacerdotes, religiosas, diáconos y agentes de la pastoral a las familias, hombres y mujeres, ancianos, jóvenes y niños, a todos los sectores productivos, sociales, educativos y, con gran preferencia hacia los pobres y lo que no tienen voz.
Sostuvo que viene con gran sentido de apertura para hacer realidad esa Iglesia Misionera en salida que propone el Papa Francisco, y con las directrices pastorales de sus antecesores que se enfocan en el III Plan Nacional de Pastoral, que representa la unidad de la iglesia dominicana.
Los asistentes. La ceremonia de ordenación también contó con la presencia de monseñor Ghaleb Moussa Abdallah Bader, nuncio apostólico del Papa Francisco; monseñor Freddy Bretón, arzobispo metropolitano de la arquidiócesis de Santiago, y monseñor Roberto González, arzobispo de San Juan, Puerto Rico.
También estuvieron presentes el ministro de Educación, Andrés Navarro; Roberto Rodríguez Marchena, director de Información de la Presidencia; el senador José Hazim Frappier; el gobernador Luis Miguel Piccirillo; el alcalde Ramón Antonio Echavarría y otras personalidades.
Feligreses contentos. Esta diócesis tenía como obispo emérito y administrador apostólico a monseñor Rafael Felipe, luego de la designación de monseñor Francisco Ozoria Acosta como arzobispo de Santo Domingo, quien desempeñara el cargo durante 18 años.
Los feligreses que asistieron a la actividad expresaron su satisfacción por tener de nuevo a un obispo y, dijeron esperar que el nuevo incumbente haga un trabajo efectivo en favor de la iglesia.