Este medio publica la primera de dos entregas contentivas del interrogatorio al abogado Francisco Álvarez, que en calidad de testigo le hizo la Procuraduría de Persecución de la Corrupción Administrativa, en el caso de la suspendida magistrada Awilda Reyes Beltré.

El miembro de Participación Ciudadana (PC) narró que la jueza temía por su integridad física y de su familia, y que recibió órdenes del exprocurador Radhamés Jiménez, que incluso la buscó en la academia en la que es docente.

Este es el interrogatorio:
En la ciudad de Santo Domingo, Distrito Nacional, el primero de diciembre de 2015, a las 3:35 de la tarde, por ante mí, licenciada Laura Ma. Guerrero Pelletier, procuradora general adjunta de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, titular de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), de la Procuraduría General de la República, representante del Ministerio Público en el presente sumario, compareció, libre y voluntariamente, a nuestro despacho, sito en la tercera planta o nivel del viejo Palacio de Justicia del Centro de los Héroes de Constanza, Maimón y Estero Hondo, donde está el domicilio de la Procuraduría General de la República; un ciudadano de nombre Francisco José Juan Rafael Álvarez Valdez, quien fue interrogado como a continuación se expresa:

P. ¿Cuáles son sus nombres y apellidos, edad, estado civil, ocupación o profesión, nacionalidad, residencia o domicilio, lugar y fecha de nacimiento?

R. Mis nombres y apellidos son Francisco José Juan Rafael Álvarez Valdez, dominicano, cédula de identidad y electoral No. XXX-XXXXX 616-1, soltero, 58 años de edad, abogado, nacido el 23 de noviembre de 1957, en la ciudad de Santo Domingo, domiciliado y residente en la calle C (El Callao), Edif. 11 Palmerie, piso 4, apartamento 3, Ensanche Serrallés, Santo Domingo, Distrito Nacional. (Omitimos aquí los números de teléfono, por respeto a la privacidad).
P. Señor Francisco Álvarez Valdez, ¿Cuáles son sus actividades?
R. Soy abogado y miembro del movimiento cívico Participación Ciudadana.
P. En días recientes han salido a la luz una serie de casos que involucran la prevaricación, en la que han incurrido jueces dentro del Poder Judicial, a quienes se les indica en el manejo o negociación ilícito de procesos a su cargo.
En ese tenor, se ha puesto de manifiesto que el movimiento Participación Ciudadana a través de usted y otros miembros ha tenido conocimiento relevante sobre los mismos, señalándose de manera específica un caso en el que estaría involucrada la suspendida magistrada Awilda Inés Reyes Beltré. ¿Podría informarnos y darnos detalles de todo lo que tenga conocimiento a este respecto?.
R. El martes 24 de noviembre, según me informó la señora Rosalía Sosa, directora ejecutiva de Participación Ciudadana, recibió una llamada del doctor Harold Echavarría, procurando una entrevista en nuestra entidad para la magistrada Reyes Beltré.
Siempre de acuerdo con las declaraciones de Sosa, ésta se comunicó con el coordinador general de Participación Ciudadana, quien la autorizó a recibir a la magistrada Reyes, pero en compañía de otro miembro de la organización y para tales fines me escogieron a mí.
La reunión con la magistrada Reyes Beltré se llevó a cabo el miércoles 25 de noviembre a partir de las 11:30 de la mañana en la sede de nuestra organización, en la calle Wenceslao Álvarez No. 8, Zona Universitaria de esta ciudad.
En la reunión participaron la magistrada Awilda Reyes Beltré y el señor Harold Echavarría, quien la acompañó, y de parte de Participación Ciudadana, la señora Rosalía Sosa y yo.
Las primeras declaraciones de la magistrada Reyes Beltré a nosotros fueron para expresarnos su alta preocupación por su integridad física y la de su familia, debido a la gravedad de los hechos en los que estaba involucrada.
En ese momento yo le expresé que conocíamos la versión ofrecida por el magistrado presidente de la Suprema Corte de Justicia, doctor Mariano Germán Mejía, pero que no conocíamos su versión de los hechos para evaluar los riesgos que podría correr su vida, y la motivé a que nos informara sobre su versión de los hechos.
La magistrada Awilda Reyes Beltré comenzó a informarnos sobre la forma en la que dictó las tres sentencias que han causado revuelo público, es decir, la sentencia por la cual liberó el avión relacionado con el caso Banco Peravia, la sentencia relacionada con el caso Atiemar y la sentencia relacionada con la liberación del regidor de Pedro Brand.
Nos informó que con respecto a la sentencia del avión del caso Banco Peravia, ninguna persona influyó en su decisión, pero que con respecto a las sentencias del caso Atiemar y del regidor de Pedro Brand, recibió instrucciones superiores para dictarlas en la forma en las que lo hizo.
A una pregunta de quién le dio esas instrucciones, respondió que fue el miembro del Consejo del Poder Judicial, Francisco Arias Valera, quien le decía que actuaba por instrucción a su vez, del presidente de la Suprema Corte de Justicia, Mariano Germán Mejía.
También nos informó que recibió instrucciones para fallar estos dos casos de parte del exprocurador general de la República, doctor Radhamés Jiménez, de manera específica para el caso de Atiemar; nos informó que en una fecha que no pudo precisar, cuando salía de su clase en Apec se encontró esperándola a Francisco Arias Valera y a Radhamés Jiménez. También nos informó la magistrada que fue llamada a raíz de esta sentencia del caso Atiemar por el magistrado presidente de la Suprema Corte de Justicia, a una reunión en su despacho; el presidente de la Suprema Corte la cuestionó que por qué había dictado esa sentencia en la forma en la que lo había hecho, y ella respondió, que por instrucciones superiores.
El magistrado le preguntó que de quién y ella le respondió, que de Francisco Arias Valera, quien a su vez le había dicho que era por instrucciones de Mariano Germán Mejía.
La magistrada nos dijo que el magistrado Germán Mejía negó haber impartido esas instrucciones.
Posteriormente, comenzó a recibir presión para liberar al regidor de Monte Plata; en esa ocasión llegó a recibir la visita en su casa en horas de la noche del consejero Francisco Arias Valera, quien la cuestionó por la dilación en ejecutar las instrucciones. Ella le respondió que se debía a que Mariano Germán había desmentido que le diera instrucciones a Francisco Arias de instruir a su vez a la magistrada Awilda Reyes.
La respuesta del consejero Arias Valera fue que era lógico que el presidente de la Suprema lo negara, pues nunca lo reconocería frente a otras personas y según la magistrada, le pasó su teléfono celular para que conversara con doctor Radhamés Jiménez, quien le confirmó las instrucciones.