NUEVA YORK. Novak Djokovic venció a Andy Murray por 6-3, 7-6 (2) en partido de exhibición celebrado en el Madison Square Garden de Nueva York el lunes en un encuentro en que ambos mezclaron las tradicionales bromas de estos juegos con largos intercambios que hicieron recordar sus duelos en torneos de Grand Slam.

Djokovic, que tiene facilidad para el espectáculo, siempre tiene sus ratos de diversión con los aficionados que acuden al Abierto de Estados Unidos en Nueva York.

El lunes, cuando estaba un punto de ganar el partido, estrelló su remate en la red y como castigo hizo varias lagartijas.    Fue la primera vez que ambos juegan en ese escenario.

“Me sorprendió el tamaño”, dijo Djokovic. “Con la historia que tiene en el mundo de los deportes y el entretenimiento probablemente es la arena cubierta más impresionante del mundo”.

Murray gesticuló varias veces al cometer errores no forzados, como si estuviera a unas millas de distancia, en Flushing Meadows, donde se juega el Abierto de Estados Unidos. Pero también chocó las palmas con un aficionado tras lograr un winner y brindó mucho entretenimiento por el simple hecho de correr tras todas y cada una de las pelotas.

Al perseguir un tiro corto cerca de la red en el primer set, Murray cayó y rodó hasta la cancha de Djikovic llevándose una cámara en el viaje. El serbio se acercó y le dio masaje en la pierna para que no tuviera que pedir un tiempo fuera.

Durante un cambio en el servicio, ambos sacaron sus teléfonos y se tomaron una foto en la red. En el siguiente descanso las publicaron en la red social Twitter.

“Quizá nunca tengamos la oportunidad de volver a jugar aquí”, dijo Murray. “Queríamos disfrutarlo, ojalá que todos los que vinieron también lo hayan disfrutado”.