CLEVELAND, Ohio, EE.UU. Aunque el marcador se apretaba, Kevin Durant mantuvo la calma. Envuelto en ropa de calentamiento en la banca de Oklahoma, Durant sabía que podría ser llamado de nuevo. Cuando eso sucedió, el líder anotador de la NBA se encargó de Cleveland.
“Mi mente siempre está enfocada en el juego, nunca me distraigo”, dijo. “Estaba listo en el momento”.
Durant anotó 35 puntos y recobró la puntería luego de un difícil inicio; en el minuto final logró cinco tiros libres y contuvo un fiero intento de regreso de Cleveland para llevar al Thunder a su 50ava victoria de la campaña por marcador de 102-95 el jueves por la noche.
Durant falló cinco de su primeros seis tiros a la canasta, pero el máximo anotador de la NBA logró prenderse a tiempo y ahora tiene 33 partidos consecutivos con por lo menos 25 puntos, la segunda racha más larga en la historia desde los 40 en fila de Michael Jordan (1986-87).
Con el triunfo el Thunder, que vio cómo su ventaja de 24 puntos se reducía a cinco en el cuarto periodo se acercó a 1½ juegos de San Antonio en la competencia por la mejor marca en la Conferencia del Oeste.
Oklahoma jugó sin el base Russell Westbrook, quien fue a la banca para dar descanso a su rodilla recién operada.
Dion Waiters anotó 30 puntos para los Cavaliers mientras Spencer Hawes logró 20; Cleveland llegó a estar abajo 95-71 cuando restaban 6:34 minutos de juego pero montó una embestida de 21 puntos a favor por sólo 2 en contra para acercarse a 97-92.
Pero Durant, que había entrado poco antes, encestó sus cinco libres para acabar con la racha de Cleveland. Cuando fue a la banca luego de tres periodos Durant pensó que su actuación había terminado. “Pero en esta liga puede pasar de todo”, dijo.
“Los chicos tienen su orgullo y Cleveland juega muy duro, así que pusieron el partido peleado y tuvimos que cerrar fuerte”. Cleveland no contó con su estelar base Kyrie Irving, quien tiene una lesion en el bíceps, ni con el alero Luol Deng, fuera por una dolencia en el tobillo.