Echar adelante al turismo

Los indicadores sobre la marcha de la industria turística dominicana son satisfactorios. Un renglón que tiende a llenar expectativas, constituyéndose en gran pilar de la economía.

Las metas de expansión están definidas. Solo podría preocupar que alcanzada la importancia, el país le quede corto a la pujanza del turismo en cuanto a infraestructuras que constantemente son puestas a prueba por el crecimiento que cada vez más demanda leyes en armonía con la realidad; que requiere políticas integrales más efectivas y condiciones sociales y ambientales más favorables que rodeen de claras reglas la gestión turística y de hospitalidad al visitante.

Con sentido de oportunidad el empresariado sintetiza su reclamo fundamental para el mayor éxito del sector turístico en una palabra: Institucionalidad. Equivale a proponer que las autoridades nacionales acompasen su accionar legislativo, reglamentador y ejecutor a la meta trazada por ellas mismas de recibir a mediano plazo un minimo ascendente de diez millones de vacacionistas extranjeros al año.

Para avanzar con solidez hacia esas marcas se requiere de una estrategia bien ideada y solventada de promoción en el exterior.

Para preservar avances en el turismo es imprescindible reducir con premura las arrabalizaciones que afectan entornos de polos turísticos invirtiendo en reordenamientos urbanos y poniendo fin a desórdenes y deterioros territoriales.